La epidemia de Covid-19 acapara las atenciones, y no pasa por alto que para prevenirla es vital fortalecer el sistema inmune. Ello implica hábitos de vida saludables.
Cada 7 de abril se celebra el Día Mundial de la Salud. En la misma fecha, pero de 1948, fue creada la Organización Mundial de la Salud (OMS), institución que promueve los esfuerzos sanitarios a nivel mundial, y que cada año dedica esta jornada a un tema de actualidad.
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Sin embargo, la proliferación del nuevo coronavirus y la subsiguiente pandemia de Covid-19, motivan una mirada hacia las formas de protegerse de la misma. Una de las vías, como contra todo virus, es mantener fortalecido el sistema inmune a través de hábitos y estilos de vida saludables.
En el logro de tal objetivo, resaltan siete pautas fundamentales que toda persona debería seguir. La primera de ellas es mantener un sistema de alimentación sano y equilibrado, modificando la matriz alimenticia que predomina actualmente.
Reducir el consumo de proteína de origen animal, las grasas y los hidratos de carbono, y sustituirlos por frutas, verduras y alimentos ricos en fibra. De igual forma, reorganizar las frecuencias y cantidades de alimentos que se consumen, desayunar ligero, comida principal a mediodía más fuerte y una cena muy ligera.
En segundo lugar, el ejercicio físico. Unido a la alimentación sana, son los dos pilares básicos de una vida sana. Se calcula que una persona promedio debe ejercitarse al menos cuatro veces a la semana, por 40 minutos o más.
Los beneficios de la actividad física están científicamente probados. Mejoras en el sistema cardiopulmonar, control del peso, flexibilidad de movimientos, reducción del estrés e incremento de la autoestima, son algunos de ellos.
Precisamente el control del estrés es otro de los aspectos llamados a mantener en la mira. Los efectos de llamada “enfermedad de nuestro tiempo” están muy bien documentados, y solo controlándolo se puede aspirar a una vida saludable.
Hoy es el #DíaMundialDeLaActividadFísica Desde ARANOVA incentivamos los desplazamientos in itinere de nuestro personal��♀️��y fomentamos que nuestro personal disponga de tiempo libre y flexibilidad horaria para poder realizar ejercicio físico��
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Para ello, lograr un equilibrio entre el trabajo, el hogar y las actividades recreativas, tener apoyo de familiares y amigos, conducirse positivamente ante la vida, dedicar tiempo a la relajación y el sueño nocturno de entre siete y nueve horas, son algunas de las recetas.
Evitar factores de riesgo es el siguiente tema a tratar. Moderar o evitar del todo el consumo de alcohol, erradicar el consumo de tabaco, mantener una higiene adecuada, protegernos correctamente al realizar actividades de riesgo y estar preparados para enfrentar contingencias, son una parte de las cuestiones a considerar en este sentido.
Otro aspecto a tener en cuenta es la incidencia medioambiental en nuestros hábitos y estilos de vida. El frío, el calor, la incidencia del Sol, la contaminación de todo tipo, son todos factores que deben ser controlados con los medios al alcance, a fin de que no afecten la salud, o lo hagan en la menor manera posible.
La falta de actividad destruye la buena condición de todo ser humano, mientras que el movimiento y el ejercicio físico lo conserva.
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Las visitas regulares al médico deben incluirse en los puntos fundamentales. Buscar que el facultativo controle los signos vitales y de una mirada científica al cuerpo e incluso a la psiquis. Es una cuestión fundamental para la detección temprana de problemas que pueden tener rápida y fácil solución y que, de otra manera, podrían impactar sensiblemente la calidad de vida.
Por último, pero no por ello menos importante, cuidar la mente. El intelecto es la esencia que define al ser humano, pero como todo lo relativo a un ser vivo, debe ser ejercitado. Parte de ello radica en sustraerlo cada vez más de las pantallas y buscar otras actividades.
Dedicar tiempo a la distracción mental y a la actividad intelectual, en dependencia de la actividad que principalmente realiza cada persona, mantenerse actualizado en todos los sentidos, educar al individuo en la lectura, son algunas de las recomendaciones que hoy se promueven.