Todavía era marzo de 2007 cuando el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, sugirió a los países latinoamericanos unirse para trabajar en la creación de una moneda común que enfrente la “dictadura del dólar” y su debilidad, y propuso el uso del Sole de Compensación Regional (Sucre) y también el Banco del Sur.
Campestre siempre ha querido comprarse unas botas de invierno, pero su economía es tan precaria a pesar de sus tres trabajos. Se las imagina, se ve con sus botas puestas cubriendo sus pies de las temperaturas bajo cero. La ropa de invierno es cara y las botas mucho más, tener ropa de invierno es una opulencia para un migrante indocumentado como Campestre, de 76 años, sin derechos laborales.
La Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), fue creada en Caracas entre los días 2 y 3 de diciembre de 2011 en el marco de la IIIª Cumbre de América Latina y el Caribe sobre Integración y Desarrollo (CALC) y de la XXIIª Cumbre del Grupo de Río. La reunión se llevó a cabo como parte de las conmemoraciones por el bicentenario del inicio de los procesos de independencia de los países del área. Y, siendo el presidente Hugo Chávez quien la convocó, la elección de la fecha no pudo ser casual. Un 2 de diciembre, pero de 1823 y en Washington, James Monroe, quinto presidente de Estados Unidos, había anunciado en su discurso anual al Congreso de la Unión la doctrina que llevaría su nombre. Ciento ochenta y ocho años más tarde ese mismo día nacería la CELAC, una de las iniciativas estratégicas más importantes de los pueblos y gobiernos de la región.