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La necesidad de pacificación en el este de RD Congo, donde persiste la tensión militar, constituyó el tema central de la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de los cuatro bloques regionales africanos.

La necesidad de pacificación en el este de RD Congo, donde persiste la tensión militar, constituyó el tema central de la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de los cuatro bloques regionales africanos. | Foto: Twitter @cgtnafrica

Publicado 28 junio 2023



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La cumbre adoptó un plan conjunto para armonizar las iniciativas de las organizaciones regionales presentes y de la ONU para rebajar las tensiones en ese territorio.

La Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de alto nivel, bajo los auspicios de la Unión Africana (UA), para coordinar y armonizar las respuestas regionales en torno al conflicto en la República Democrática del Congo (RDC), se llevó a cabo este martes en Luanda, capital de Angola.

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Congo alberga 600.000 desplazados en condiciones precarias

El presidente en funciones de la organización regional, Azali Assoumani, afirmó que la desestabilización en el occidente de ese país “podría llevar a toda África por el mismo camino”.

En ese sentido, defendió la “intensificación de acciones conjuntas y activas para llegar a soluciones en favor de un Congo pacífico y próspero”.

“Para eso necesitamos soluciones políticas, diplomáticas y de seguridad que sean adecuadas, efectivas, innovadoras para que podamos reforzarlas para evitar la duplicidad de esfuerzos y también la competencia entre mecanismos regionales”, indicó.

Los participantes demandaron la retirada de la nación congoleña del Movimiento 23 de Marzo (M23), las Fuerzas Democráticas Aliadas (ADF) y las Fuerzas Democráticas para la Liberación del Congo (FDL).

En tanto, resaltaron "la necesidad de restablecimiento de la autoridad estatal en las áreas ocupadas del este de la RDC, para crear un entorno propicio para el regreso de los refugiados y desplazados internos y para permitir que se celebren elecciones pacíficas en estas áreas".

Asimismo, la cumbre adoptó un plan conjunto para armonizar las iniciativas de las organizaciones regionales presentes y de la ONU "de acuerdo con sus instrumentos y decisiones pertinentes" y con "una división clara de responsabilidades y plazos acordados".

Para ello, apoyó la creación de un Grupo de Trabajo de Coordinación Multinivel "centrado en las dimensiones políticas, diplomáticas, militares, humanitarias y socioeconómicas, para facilitar el intercambio continuo de información y promover la coherencia".

Los altos representantes de la Comunidad de Desarrollo de África Meridional (SADC), la Comunidad de África Oriental (EAC), la Conferencia Internacional sobre la Región de los Grandes Lagos (ICRGL) y la Comunidad Económica de los Estados de África Central (ECCAS) participaron en el  encuentro.

En RDC, la ausencia de alternativas y métodos de subsistencia estables han empujado a miles de sus nacionales a tomar las armas. Se estima en la presencia de unos 120 grupos rebeldes el extremo oriental del país.

Debido a esto, unas 600.000 personas desplazadas viven en condiciones desesperadas y enfrentan un suministro de alimentos inadecuado, falta de atención sanitaria y violencia frecuente en ese territorio.


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