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Luego de casi tres meses en su lujosa casa, el genocida argentino Miguel Etchecolatz volverá a la cárcel para cumplir su cadena perpetua.
La prisión domiciliaria otorgada a finales de 2017 al represor y exdirector de investigaciones de la Policía de Buenos Aires, Miguel Etchecolatz, fue revocada este viernes por la Cámara Federal de Casación Penal de Argentina.
El genocida condenado a cadena perpetua por delitos de lesa humanidad en la última dictadura de Argentina (1976-1983) deberá cumplir su sentencia en la cárcel, tras la petición de múltiples movilizaciones de organismos de derechos humanos, incluso por su propia hija biológica, Mariana Dopazo.
De acuerdo al fallo de la Sala IV del Tribunal, la salud del represor argentino de 88 años, no le impide permanecer alojado en un establecimiento penitenciario, recibiendo la atención y los controles médicos adecuados.
La Justicia Argentina decidió que el represor Miguel Etchecolatz vuelva a la carcel. Se le revocó el arresto domiciliario que lo beneficiaba y que fue repudiado los organismos DDHH, entre ellos las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo. Memoria, verdad y justicia. @temasteleSUR pic.twitter.com/lSNiN9NQvy
— Edgardo Esteban (@edgardotlsur) 16 de marzo de 2018
Etchecolatz, fue trasladado en diciembre pasado a uno de sus domicilios de un exclusivo barrio de Mar del Plata, para seguir cumpliendo su pena. El beneficio fue rechazado por diversos organismos de derechos humanos, quienes manifestaron su indignación y repudio ante la impunidad y las flexibilidades otorgadas por el Gobierno del presidente de Argentina, Mauricio Macri, a los más de mil represores condenados por los crímenes cometidos durante la última dictadura argentina.
De acuerdo a los últimos datos publicados por la Procuraduría de Crímenes contra la Humanidad de los 1.064 detenidos (entre condenados y procesados) por los crímenes de lesa humanidad ocurridos en Argentina, 533 gozaban de prisión domiciliaria y 449 estaban en cárceles, además de 38 prófugos.
Entre marzo de 1976 y enero de 1979, Etchecolatz organizó los comandos encargados de secuestrar y torturar a miles de trabajadores y estudiantes en el Circuito Camps, integrado por 29 centros clandestinos de detención.
Etchecolatz condenado por ser uno de los peores torturadores de los secuestrados durante 1976-1983 acumula imputaciones por las que todavía no ha tenido sentencia en juzgados federales de La Plata y la ciudad de Buenos Aires.
En un juicio oral, en 2014, admitió haber asesinado a perseguidos políticos durante la dictadura Argentina.
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