El pueblo catalán abrazó a sus presos en la vigilia de la Diada | Blog | teleSUR
10 septiembre 2018
El pueblo catalán abrazó a sus presos en la vigilia de la Diada

La masiva columna serpentea por un camino de tierra que sube y baja cada tanto. Los manifestantes (muchas mujeres de todas las edades, hombres,  jóvenes y una buena cantidad de niños y niñas) llevan en sus manos unas antorchas especiales que reemplazan el fuego por una luz blanca que parpadea y genera, en la noche cerrada, llamativos dibujos. Todos y todas las que marchan mostrando orgullo por hacer la travesía lucen distintivos amarillos y gritan rítmicamente “libertad a los presos políticos”, entonando la consigna en catalán y agitando el aire y la penetrante oscuridad con un ramillete de fantasmagóricas luces blancas. También abundan senyeras (las banderas con las que Catalunya le grita al mundo que quiere ser independiente, y si cabe, también socialista.    

El pueblo catalán abrazó a sus presos en la vigilia de la Diada

Estamos en Manresa, a poco más de una hora y media de Barcelona, acompañando de buena gana la vigilia por la libertad de los presos políticos catalanes, esos que el gobierno fascista de Rajoy mandó a la carcel por no poder soportar sus ansias de soberanía y autodeterminación. Y a los que también el gobierno social derechista del PSOE (el mismo perro con diferente collar) no quiere dejar en libertad, porque “atentan contra la unidad de España”.                                 

La columna atraviesa un túnel por donde discurre un hilo de agua y en ese imponente marco de inmejorable acústica, los marchistas entonan “Els Segador”, el himno oficial de Catalunya, que evoca cuando los ciudadanos se rebelaron ante un decreto de Felipe IV.

La piel se sensibiliza de inmediato mientras a algunos ancianos los ojos se les llenan de lágrimas, cuando las paredes de hierro del pasadizo devuelven a los manifestantes esas estrofas que alertan: ¡Que tiemble el enemigo /viendo nuestra enseña: /como hacemos caer espigas de oro, /cuando conviene segamos cadenas! 

La prisión de Lledoners ya está más cerca y es el momento justo para mirar hacia atrás y constatar que son casi diez mil los que hacen el recorrido para respaldar a Oriol Junqueras, Raúl Romeva, Josep Rull, Jordi Turull, Quim Forn, Jordi Sánchez  y Jordi Cuixart, allí encerrados por obra y gracia de la prepotencia revanchista del imperio español. Estos miles, finalmente allí reunidos frente a los muros de la vergüenza, representan a millones  que desde hace un buen tiempo han decidido no quedarse más callados y exigen “independencia” y que Catalunya sea “una República”. Disciplinados, solidarios y con la decisión de luchar para que los detenidos vuelvan a casa, los manifestantes intercambian abrazos y algo más. Se saben victoriosos a mediano plazo, son conscientes que la libertad que tanto reclaman y vitorean solo se va ganar en la calles.

Por ello, escriben con sus antorchas la palabra “libertad”, mientras desde las ventanas enrejadas del penal, los prisioneros saludan agitando pañuelos y alguna senyera. Suenan más canciones patrióticas, llegan noticias de que otros miles repiten el mismo escenario en Barcelona y otras ciudades y pueblos más pequeños. En el aire se respira autodeterminación, mientras la periodista Bea Talegón es ovacionada al leer un manifiesto de agradecimiento a la dignidad de ese pueblo. Sus palabras tienen un valor especial, ya que ella que dice no ser independentista, se inclina respetuosamente a la voluntad de quienes sí lo son y pelean pacíficamente, pero con firmeza, para lograrlo.

Estamos en la vigilia de la noche previa a la Diada, la conmemoración del día de la Independencia, cuando el 11 de septiembre de 1714, después de 14 meses de ser sitiados y luchar heroicamente, los defensores de Barcelona fueron derrotados por las tropas borbónicas. Derrota pírrica que dejó olor a triunfo en los defensores de la ciudad, por más que la barbarie española arrasó con todas las instituciones catalanas.

Ahora, 304 años después, el pueblo vuelve a llenar las anchas avenidas de reivindicación nacional y patriótica, van por la revancha y se saben seguros de defender una causa justa. No los paran ni los gruesos barrotes de las cárceles neofranquistas. Visca Catalunya Lliure, gritan. Libre, libre, libre.


teleSUR no se hace responsable de las opiniones emitidas en esta sección




Perfil del Bloguero
Periodista argentino en medios de prensa escrita y digital, radio y TV. Escritor de varios libros de temas de política internacional. Director del periódico Resumen Latinoamericano. Coordinador de Cátedras Bolivarianas, ámbito de reflexión y debate sobre América Latina y el Tercer Mundo.
Más artículos de este bloguero



Comentarios
0
Comentarios
Nota sin comentarios.