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El dignatario de Cuba resaltó que a la Revolución aún le “quedan muchas batallas por contar y muchos méritos por destacar".

El dignatario de Cuba resaltó que a la Revolución aún le “quedan muchas batallas por contar y muchos méritos por destacar". | Foto: Cubadebate

Publicado 1 enero 2024



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“Esta es la Revolución que ganó las libertades democráticas para todos los trabajadores, al poner en sus manos los medios de producción", precisó el mandatario cubano.

El presidente de Cuba, Miguel Díaz Canel, reseñó este lunes los 65 años de la Revolución Cubana, en el acto conmemorativo por el aniversario de la histórica gesta que tuvo lugar en la provincia de Santiago de Cuba (Oriente).

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Al dirigirse al pueblo frente a la antigua sede del ayuntamiento de esa ciudad, desde donde el 1 de enero de 1959 Fidel Castro convocó al pueblo a apoyar al Gobierno revolucionario, jefe de Estado destacó el significativo papel de la ciudad de Santiago de Cuba en la historia de nación.

El presidente indicó que Fidel y sus compañeros bebieron de los idearios de José Martí, Antonio Maceo y otros mambises que legaron eticidad y moral a la lucha revolucionaria que emprendieron en el siglo XX.

Destacó que después de 1959 se llevaron adelante obras de “sostenido calado social que en pocos años transformaron a un país pobre y atrasado en un referente mundial en educación, salud, deportes y cultura”.

El mandatario precisó que la Revolución Cubana no sólo liberó al país de una dictadura represiva y corrupta, sino que desató los nudos de las transnacionales estadounidenses y eliminó el trabajo infantil, la prostitución entre otros males sociales.

“Esta es la revolución genuina y profunda de la reforma agraria y de la reforma urbana que empoderó al pueblo al nacionalizar los servicios, los intereses populares, las tierras, las industrias, los bancos, las comunicaciones, las grandes construcciones e inversiones, el transporte, el comercio interior y exterior”, manifestó.

El mandatario repasó los avances que ha tenido Cuba a lo largo de seis décadas en esferas como la salud y la educación, y destacó la ayuda solidaria a países necesitados siguiendo las experiencias cubanas en ambos ámbitos, a tono con el ejemplo de Ernesto Che Guevara.

Asimismo, precisó que la educación superior, la ciencia y la tecnología, el cuidado del medio ambiente y el desarrollo sostenible resaltan por los aportes para remontar los obstáculos que impone el bloqueo de Estados Unidos contra Cuba.

 

“Creemos firmemente en la capacidad revolucionadora y transformadora de la mente humana para hacer realidad los sueños más grandes. Es una de las enseñanzas de Fidel que podemos practicar en todos los ámbitos hoy”, aseguró, y destacó el papel de la mujer en el proceso revolucionario.

El dignatario resaltó el rol del deporte y la cultura al servicio del pueblo, luego de que se eliminase el carácter elitista de ambas manifestaciones. Igualmente, indicó que se ha aumentado en el país la generación de electricidad y se han construido más carreteras y caminos que en toda la historia anterior de Cuba.

“Esta es la Revolución que ganó las libertades democráticas para todos los trabajadores, al poner en sus manos los medios de producción, lo que se manifiesta en la participación popular creciente, en la gestión económica y en la toma de decisiones en las cuestiones del desarrollo económico y social del país”, manifestó.

El presidente cubano destacó que los logros de la Revolución Cubana se han mantenido a pesar de una política de desgaste por parte del Gobierno estadounidense, que le han enseñado a desarrollar su capacidad defensiva, y mantiene una política internacional independiente, basada en ideales de cooperación y amistad con todas las naciones que respetan la soberanía cubana.

“Si la contrarrevolución de origen cubano no ha podido vencer a Cuba en ningún terreno a lo largo de estos años, esa es la obra de la Revolución en sus organismos y órganos de inteligencia y defensa de la Seguridad del Estado y esa es una de las razones por las que hemos derrotado al poderoso enemigo de la pequeña Cuba en lo político, lo económico, lo ideológico y lo militar, convirtiendo al socialismo cubano en un hecho histórico e irreversible”, aseguró.

Asimismo, reconoció el rol del Partido Comunista de Cuba (PCC) y las organizaciones políticas y de masas en la preservación de las conquistas de la Revolución cubana.

“La Revolución somos todos. Más allá de lo que ha representado la Revolución en el orden material, aunque algunos lo olviden en la intensidad de las carencias actuales”, precisó y reconoció la alta conciencia política que tiene la mayoría del pueblo cubano que lucha por vencer los errores.

En este sentido, el dignatario resaltó que aún “quedan muchas batallas por contar y muchos méritos por destacar, incontables proezas que quizás jamás conoceremos. En una Revolución bajo asedio perpetuo, el silencio también es un arma y la modestia una escuela”.

Díaz Canel denunció además al bloqueo estadounidense, y aseguró que “la mayoría del pueblo cubano sabe que la unidad en torno al Partido y la Revolución permitirá preservar la nación cubana y las conquistas” y destacó que el pueblo de Cuba está llamado a preservar el futuro.

“Este país cuenta con dignidad, talento y voluntad suficientes para levantarse con sus propios esfuerzos por encima del cerco y saltarlo. No será en un día pero lo haremos”, dijo.

Raúl Castro: la Revolución ha valido la pena

Por su parte, el líder histórico de la Revolución Cubana, Raúl Castro, reconoció que han sido muchos los desafíos enfrentados para llegar al 65 aniversario de la Revolución, “pero ha valido la pena. La obra de la Revolución y sus conquistas sociales aún en medio de las dificultades así lo corroboran”.

“Nos congrega el mismo lugar donde Fidel proclamó, el 1 de enero de 1959, el triunfo de la única Revolución que ha existido en Cuba iniciada el 10 de octubre de 1868 por Carlos Manuel de Céspedes, el Padre de la Patria y cuyo nombre lleva esta plaza”, expresó.

El general de Ejército expresó que 1 de enero de 1899, el Gobierno estadounidense usurpó la victoria al pueblo cubano sobre España, y dominó la isla durante 60 años. Igualmente, recordó las palabras de Fidel Castro la noche del 1 de enero de 1959, en las que advirtió que “la Revolución empieza ahora. La Revolución no será una tarea fácil. La Revolución será una empresa dura y llena de peligros”.

 

Destacó que el camino no ha sido fácil, sobre todo por la agresividad del Gobierno estadounidense, su agresión militar, terrorista y el bloqueo para destruir la Revolución y borrar su ejemplo para otros pueblos.

"La política de hostilidad permanente y de bloqueo del Gobierno de los Estados Unidos es la principal causa de las dificultades de nuestra economía. No tengan dudas de esta realidad. Aunque el enemigo invierta millones de dólares y mucho esfuerzo para ocultarla", precisó.

Indicó que la dirección de la Revolución se ha caracterizado a lo largo de los 65 años por su transparencia y espíritu autocrítico, al debatir con el pueblo las insuficiencias para erradicarlas entre todos.

En este sentido, manifestó que Cuba se ha visto obligada a crear sus propias maneras de hacer, lo cual indica la capacidad creadora de la Isla, que ha superado agresiones externas, la fuerza de la naturaleza y nuestros propios errores a lo largo de 65 años.

"Aquí estamos y aquí estaremos", aseguró, y señaló que esto ha sido posible por la resistencia del pueblo, la sabia conducción del Comandante en Jefe, Fidel Castro, la existencia del Partido y la unidad de la nación.

 


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