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El portavoz del Gobierno polaco apuntó que si Kiev revoca su demanda ante la OMC de manera incondicional, esto sería un gesto de buena voluntad.
El viceministro de Economía de Ucrania, Taras Kachka, dijo este miércoles que su país revocará las demandas ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) contra sus vecinos: Eslovaquia, Hungría y Polonia, con la condición de que estos garanticen que no existirá una prohibición a las exportaciones de su grano en el futuro.
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Sin embargo, autoridades de los países implicados salieron en respuesta a estas declaraciones. El portavoz del Gobierno polaco, Piotr Müller, apuntó que si Kiev revoca su demanda ante la OMC de manera incondicional, esto sería un gesto de buena voluntad y "demostraría que Ucrania todavía quiere hablar como un socio".
El funcionario afirmó en televisión nacional que "Ucrania quiere de facto que las mercancías puedan entrar en Polonia sin restricciones estrictas”, a lo que con vehemencia agregó que “por el momento esto es inaceptable".
Müller insistió en que el embargo continuará vigente hasta que la entrada de granos ucranianos no suponga un impacto negativo en el mercado agrícola de Polonia, a lo que añadió que dudaba que esto "suceda en un futuro próximo".
Por su parte, el Gobierno de Hungría, en voz del ministro de la Oficina del Primer Ministro, Gergely Gulyas, dijo en una conferencia de prensa que "el Gobierno estudió la situación tras la prohibición de importar el grano ucraniano. Vemos que la medida fue correcta y que funciona".
El funcionario, cercano colaborador del primer ministro, Viktor Orbán, agregó que su país no quiere que "el grano ucraniano de baja calidad inunde el mercado agrícola húngaro", pero que continuará permitiendo que este transite por su territorio para que pueda llegar a "Estados africanos en donde persisten el hambre y las privaciones".
