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El ministro de Interior del estado, Anil Vij, aseguró que la violencia había sido “diseñada” y que la policía investigaría los sucesos.
Las autoridades de India impusieron este martes un toque de queda, suspendieron el servicio de internet y desplegaron miles de paramilitares en zonas del estado de Haryana, tras los enfrentamientos entre comunidades religiosas.
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Al menos cuatro personas murieron, más de 20 policías resultaron heridos y docenas de autos ardieron en medio de la violencia entre hindúes y musulmanes.
El altercado comenzó el lunes por la tarde durante una procesión religiosa de un grupo nacionalista hindú. Las tensiones se expandieron después a Gurugram, a unos 30 kilómetros de Nueva Delhi, donde turbas de gente prendieron fuego a una mezquita y mataron a un clérigo musulmán el lunes por la noche.
सुनियोजित और षडयंत्र पूर्ण तरीके से नूंह में सामाजिक यात्रा को भंग करने के लिए आक्रमण किया गया और पुलिस को भी निशाना बनाया गया, जो बड़ी साजिश की तरफ इशारा करता है।
— Manohar Lal (@mlkhattar) August 1, 2023
केंद्र और प्रदेश सरकार की ओर से भेजे गए सुरक्षा बल फिलहाल वहाँ तैनात हैं और स्थिति पर नियंत्रण पा लिया गया है।… pic.twitter.com/BhHI7czrVd
En tanto, el martes no se produjeron reportes de nuevos incidentes, pero las autoridades ordenaron el cierre de escuelas y universidades como medida de precaución.
El ministro jefe de Haryana, Manohar Lal Khattar, condenó la violencia en Nuh en la red social X. “Los culpables no se librarán bajo ningún precio. Se tomarán las medidas más estrictas contra ellos", afirmó.
Mientras, el ministro de Interior del estado, Anil Vij, aseguró que la violencia había sido “diseñada” y que la policía investigaría los sucesos.
