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Autoridades francesas indican que la velocidad del viento, la sequía y las altas temperaturas han provocado la rápida propagación de las llamas.

Autoridades francesas indican que la velocidad del viento, la sequía y las altas temperaturas han provocado la rápida propagación de las llamas. | Foto: EFE

Publicado 10 agosto 2022



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Las autoridades de Gironda indican que el siniestro continúa siendo “muy vigoroso”, y cuentan con más de 1.000 bomberos y una brigada aérea para su extinción.

Al menos 6.000 personas han sido evacuadas este miércoles por un incendio forestal reactivado el martes en la ciudad de Landiras, perteneciente al sureño departamento francés de Gironda, y que ha devorado más de 6.000 hectáreas de tierra.

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El prefecto delegado para la seguridad de la zona de defensa del suroeste de Francia, Martin Guespereau, aseveró que el siniestro continúa siendo “muy vigoroso” y hasta el momento ha dejado un saldo de 16 viviendas destruidas en la ciudad de Belin-Beliet.

“Es una situación muy difícil para la gente que está viviendo la misma angustia que en julio. Nuestro primer objetivo en esta lucha es salvar vidas humanas. Por el momento, no tenemos víctimas”, subrayó el funcionario francés.

La Prefectura también indica que la velocidad del viento, la sequía y las altas temperaturas han provocado la rápida propagación de las llamas, afectando una superficie comparable a seis terrenos de fútbol, donde actúan más de 1.000 bomberos y una brigada aérea.

Sobre la causa del siniestro, el prefecto Guespereau refirió que aún no se ha determinado el origen “pero de los cerca de cuarenta incendios registrados ayer en la Gironda, es evidente que algunos fueron provocados por pirómanos. Nuestro objetivo es localizarlos y ocuparnos de ellos”.

Las autoridades dieron orden de cerrar el paso por numerosas vías debido a la cercanía de las llamas, como la importante carretera A63 que comunica la ciudad de Burdeos y Bayona, y el cruce fronterizo de Irún entre Francia y España por el que se impide el tránsito de camiones de carga.

Los incendios forestales iniciaron el pasado julio en Gironda, pero a pesar de que fueron controlados, no se extinguieron del todo, y entre la madrugada del martes y el miércoles se extendieron a varias ciudades como Landas, Hostens, Saint-Magne y Moustey.

Hasta el momento, los incendios de Gironda registrados desde julio han provocado la pérdida de al menos 20.600 hectáreas de tierra y la evacuación de cerca de 36.000 personas.

Las autoridades francesas también reportan que en los últimos días, iniciaron siniestros forestales en los departamentos sureños de Drome, Lozere y Aveyron, que han destruido miles de hectáreas y por los que más de 3.000 personas han sido resguardadas.


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