El presidente de Rusia, Vladímir Putin, aprobó una ley este miércoles que condena a responsables de inducir al suicidio a menores, a través de las redes sociales.
A través del portal oficial ruso de información jurídica, anunciaron la pena de hasta seis años de prisión para las personas que incurran en este delito, que ahora pasa a ser "grave".
También se le suma el agravante de hasta ocho años de prisión, si el delito es cometido contra menores de edad, mujeres embarazadas, personas con discapacidad o grupos de dos o más personas.
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Esta norma se suma a las ya aprobadas el mes pasado por el Parlamento, las cuales van dirigidas a los responsables de difundir, explicar e inducir el suicidio.
La ley surge en un intento de acabar con los llamados "grupos de la muerte" que se extienden a través de redes sociales rápidamente.
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