El ministro de Energía de Argentina, Juan José Aranguren, afirmó este viernes que las tarifas residenciales de gas que superen los 250 pesos finales, tendrán un aumento entre 300 y 500 por ciento, en función de la categoría.
Durante la Audiencia Pública, desarrollada en el Teatro de la Ribera en Buenos Aires, Aranguren anunció la reducción del cinco por ciento a los subsidios aplicados a la producción de gas natural, lo cual representa un 40 por ciento del valor de la factura que reciben los usuarios residenciales.
>> Gas en Argentina incrementará más del 50 por ciento
A su vez, Aranguren aseguró que el objetivo gubernamental es la "reducción gradual y previsible de los subsidios a la producción y la importación de gas natural". El ministro declaró que no solo busca recuperar el costo económico de la producción, sino reducirlo.
Durante su intervención, acusó que, al momento de iniciar su gestión, encontró un sistema "distorsionado, desigual, injusto y obsoleto".
Por otra parte, en vista del aumento significativo en el costo del gas, el Defensor del Pueblo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Alejandro Amor, declaró que los incrementos en las tarifas "deben ir de la mano de los aumentos paritarios".
"No es justo que los salarios de los trabajadores se negocien una sola vez al año y los incrementos en las tarifas sean semestrales para los servicios públicos esenciales", señaló Amor, quien también es Presidente de la Asociación de Defensores del Pueblo de la República Argentina (ADPRA).
Igualmente, el Defensor del Pueblo, en claro rechazo a la medida, indicó que los precios de las tarifas implementadas deben ser pensados "en relación a la capacidad económica de los vecinos y teniendo en cuenta a los más vulnerables".