La presidenta de Argentina, Cristina Fernández, quien fue hospitalizada el pasado domingo en el sanatorio Otamendi de la capital argentina por una infección de colon suspendió su participación en la próxima cumbre del G20, que se realizará la semana próxima en Australia.
El tratamiento de Fernández demandará al menos 10 días de reposo. Sin embargo, Argentina estará representada por el ministro de Economía Axel Kicillof y por el canciller Héctor Timerman, según informó el secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro.
"Posterior al alta de internación, que se otorgará oportunamente, la Presidenta deberá mantener reposo con control evolutivo en la residencia de Olivos, contraindicándose la realización de desplazamientos, inicialmente y como mínimo, por 10 días", indicó este miércoles la Unidad Médica Presidencial.
El pasado lunes, la presidencia de Chile informó que debido al internamiento de Fernández, la visita que estaba prevista para el martes tuvo que ser reprogramada.