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Al destacar las proezas en el orden social del ALBA- TCP, el jefe de Estado cubano valoró que esta es la alianza donde muchos encontraron respuestas a un proyecto de desarrollo.
El presidente de Cuba, Miguel Díaz- Canel Bermúdez refirió este miércoles durante la XXIII Cumbre de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América - Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), que el organismo es una alianza de la solidaridad y la cooperación.
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“Es la alianza de la solidaridad y la cooperación, vencedora del pragmatismo que solo apuesta a la ganancia”, precisó el jefe de Estado cubano, al tiempo de insistir que dicha instancia fue la primera concreción de una hermandad fundada por los comandantes Fidel Castro y Hugo Chávez, la cual todavía tiene un camino por recorrer.
Al destacar las proezas en el orden social del ALBA- TCP, el jefe de Estado cubano valoró que esta es la Alianza donde muchos encontraron respuestas a un proyecto de desarrollo. “Cuba siempre estará en el ALBA-TCP, por encima de los bloqueos y las dificultades, dijo Díaz- Canel Bermúdez.
“La alianza ha probado que se ha podido hacer desde el sur”, expresó el dignatario cubano, mientras recalcó que "es la hora de los hornos como ese tiempo revolucionario de estar juntos", haciendo alusión a un concepto del Héroe Nacional cubano, José Martí.
"La coyuntura nos convoca a la acción", dijo. Entre tanto, reiteró que han señalado los peligros con que actúa impunemente Israel, con el apoyo de Estados Unidos (EE.UU.).
Exigió una solución amplia, justa y duradera al conflicto y que se contemple un Estado palestino, con Jerusalén oriental como su capital y la garantía que retornen todos los refugiados.
“Desde esta tribuna de pueblos libres, independientes y soberanos demandamos el ingreso inmediato del estado de Palestina como miembro pleno de la Organización de Naciones Unidas (ONU)”, manifestó, al puntualizar que nadie puede justificar la brutal escalada sionista de los últimos seis meses, las graves violaciones al derecho, los crímenes de guerra, “que han convertido una mínima franja de tierra habitada en campos de entrenamiento de un ejército sanguinario”.
Instó a que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas deben cumplir su mandato, al tiempo que aseveró que todos los pueblos del mundo deberíamos hacer propia la causa palestina.
Miguel Díaz Canel Bermúdez valoró que la doctrina Monroe sigue amenazando, pues “EE.UU. ataca las fuerzas de izquierda y progresistas”, infirió. "Ante las pretensiones imperialistas reafirmamos la unidad y también el fortalecimiento de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac)".
Asimismo, el presidente condenó la violenta irrupción de la policía en la sede de la embajada de México en Ecuador y la violación del asilo y soberanía. Pidió reencausar el proceso del expresidente ecuatoriano Jorge Glas, en correspondencia con el derecho internacional.
Otro de los aspectos abordados por el dignatario cubano estuvo relacionado con el proceso electoral venezolano, y felicitó al pueblo de ese país por el desarrollo del nuevo proceso electoral en un clima de paz, “pese al intento de algunos sectores de acudir a la violencia y retomar fracasados métodos que tanto dolor causaron”.
"Rechazamos la injerencia externa sobre el pueblo venezolano y denunciamos la aplicación de medidas coercitivas por Estados Unidos y reclamamos que sean levantadas en su totalidad, de forma inmediata. Permanente y sin condiciones", destacó.
“La hermana República de Haití enfrenta una crisis muy grave. La comunidad internacional tiene una gran deuda con su pueblo que fue sometido a repudiables castigos por potencias imperiales y ha sido forzada a pagar injustamente un alto precio por protagonizar la primera revolución social del continente”, denunció Díaz- Canel.
Precisó que Haití necesita asistencia y cooperación para el desarrollo que resulten verdaderas y efectivas. Indicó además que el tráfico de armas y municiones hacia Haití desde EE.UU debe detenerse.
“El pueblo haitiano tiene derecho a encontrar una solución pacífica, sostenible y duradera a los desafíos que enfrenta basada en el pelo respeto a su libre determinación, soberanía e independencia”, reafirmó el jefe de Estado.
El presidente resaltó que su Cuba ha ofrecido cooperación a Haití, aún en las circunstancias actuales mantiene una brigada médica en el país. "Hemos propuesto a través de la Celac la creación de un fondo internacional único de solidaridad para la recuperación a Haití y que se nutra de los partes de la comunidad internacional y atienda las prioridades del pueblo haitiano".
“La deuda de Haití debe ser condonada. Refrendamos las justas demandas de reparación por los daños de la esclavitud y colonialismo de los hermanos caribeños que necesitan y merecen un trato justo, especial y diferenciado”, dijo.
Subrayó que su Gobierno apoya la independencia del pueblo puertorriqueño y brindó “solidaridad con el pueblo argentino, que encontrará siempre en el ALBA- TCP un aliado en la defensa de sus intereses y reclamos”.
Agradeció el respaldo al fin del genocida e ilegal bloqueo del Gobierno de los EE.UU. contra el pueblo cubano y ratificó que aprecia la demanda de levantar a Cuba de la lista de países patrocinadores del terrorismo, puntualizó.
"Nuestra lucha continuará años tras años hasta que EE.UU levante el bloqueo", recalcó el presidente y reconoció que a medida que avanza el tiempo crece las amenazas y desafíos para la Revolución Cubana.
“El año 2024 será de triunfos y resultados, de unidad y avance”, insistió, mientras recalcó nuestro compromiso con la integración. “Seguiremos trabajando por un Alba de paz y unidad, de victorias de solidaridad y cooperación. Hagamos realidad los sueños de los fundadores de esta alianza. Juntos somos invencibles”, concretó.
