Autoridades retoman control de cárcel de Tacambú, Paraguay

El director general de Inteligencia y portavoz de la Policía Nacional de Paraguay, comisario Ever París, confirmó este miércoles que los privados de libertad que desde el martes pasado habían tomado el control de la cárcel de Tacambú llegaron a un acuerdo con las autoridades, lo cual permite el restablecimiento del orden allí.

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En declaraciones brindadas a los medios en las inmediaciones de la penitenciaría, la mayor del país suramericano, París informó que los reos dejaron en libertad a los 22 guardias que mantuvieron cautivos durante casi 15 horas y que se recuperaron las armas reglamentarias que les quitaron a los funcionarios.

También explicó que fueron liberadas varias mujeres que se hallaban dentro de la penitenciaría por motivos de visita familiar y que saldrán pronto 11 que se encontraban allí con sus respectivos esposos, en la sección para encuentros privados (que duran un día). Confirmó que estas no tuvieron participación en los hechos.

Dijo que en estos momentos se restablece el control en el penal y su director se hace cargo nuevamente de sus funciones.  Aseguró que la situación regresa a la normalidad, no se lamentaron fallecidos ni heridos, y que la Policía Nacional continuará su labor preventiva en las inmediaciones de la cárcel.

París comentó que los reos solicitaron un plazo de 15 días para la reapertura de las visitas familiares y que regresen allí un grupo de privados de libertad que fueron trasladados a otras. Adelantó que se prevé que en la tarde de este miércoles el Ministerio de Justicia brinde una conferencia de prensa sobre el caso.

De acuerdo con medios locales, un viceministro de dicha cartera, Rodrigo Nicora, quien visitó el lugar y se negó a dar declaraciones, fue a informar acerca del fin de la negociación al titular del sector, Ángel Ramón Barchini. 

Días atrás, este último aseguró que los reos habían asesinado y descuartizado a un expolicía recluido en Tacambú por delito de homicidio, Oliver Lezcano, quien en realidad se fugó del penal. Esta acusación habría provocado el amotinamiento.

Por su parte, el presidente paraguayo, Santiago Peña, negó que en el país exista una crisis carcelaria y que lo ocurrido es otra expresión del enfrentamiento del Estado con la delincuencia. Dio todo su apoyo a Barchini, cuya inmediata renuncia ya exigen legisladores de Asociación Nacional Republicana (Partido Colorado) por su incidencia en los hechos.

Los reclusos amotinados fueron liderados por el jefe del clan Rotela, Javier Rotela, quien cumple prisión por delitos vinculados al microtráfico en el área metropolitana de Asunción (capital). Se le considera el rey del microtráfico en esa región del país.

Tacambú alberga 3.000 presos y registra un hacinamiento de 607 por ciento, a juicio del criminólogo y catedrático Juan Martens. En todo el país hay alrededor de 16.000 privados de libertad, distribuidos en 18 penitenciarías.