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    Los militares estadounidenses se desplegarán por varios departamentos de Colombia durante cuatro meses.

Colombia cerró 2019 con una producción de 951 toneladas de cocaína  y con 212.000 hectáreas de hoja de coca.

La llegada de tropas de Estados Unidos a Colombia siempre ha causado controversia en el país y esta vez no es la excepción.

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Efectivos de la Fuerza de Asistencia de Seguridad del Ejército de Estados Unidos (EE.UU.), arribaron el 01 de junio al territorio colombiano con el supuesto objetivo de asesorar a las fuerzas militares del país suramericano en la lucha contra el narcotráfico. 

El anuncio realizado por la Embajada de EE.UU. en Colombia advierte que el contingente de unos 800 oficiales de Asistencia de Fuerza de Seguridad (SFAB por sus siglas en inglés) debe asesorar y apoyar las acciones del Ejército colombiano desde principios de junio y  durante varios meses. 

 

Justificación de la presencia de EE.UU.

El ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo García, explicó a un medio local que las tropas estadounidenses se desplegarán por los departamentos de Nariño,  Norte de Santander, Meta; donde se concentran la mayor cantidad de cultivos de coca en el país. 

De acuerdo ministro de defensa la  brigada norteamericana de Asistencia de Fuerza de Seguridad (SFAB por sus siglas en inglés), se desplegará principalmente en zonas del Bajo Cauca, Catatumbo, Arauca, Pacífico nariñense y los parques nacionales naturales de Chiribiquete, Sierra de La Macarena, Catatumbo Barí, Nudo de Paramillo y Sanquianga.
 
Según Bogotá en estas zonas se concentra 295.000 hectáreas de cultivos ilícitos y proyectan una producción de cocaína del 30 por ciento  nacional.

EE.UU. no garantiza disminución de producción de drogas

Sin embargo el incremento de la presencia militar de EE.UU. no representa la disminución de la producción de drogas ilícitas.
 
Colombia cerró 2019 con 212.000 hectáreas de hoja de coca, un ligero aumento desde las 208.000 hectáreas en el año previo, mientras que su capacidad para producir cocaína aumentó a 951 toneladas, desde las 879 en 2018, según la Oficina de Política Nacional de Control de Drogas de la Casa Blanca.
 
La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodv) advirtió en 2018 que la producción de cocaína, ha ido en alza, pues si bien las hectáreas cultivadas disminuyeron entre 2017 y 2018 de 171.000 a 169.000, se estima que el rendimiento fue mayor en el último año, pasando de 1.058 toneladas  a 1.120 toneladas .
 
De acuerdo a la Oficina de Política Nacional para el Control de Drogas de EE. UU. el país sudamericano disminuyó de 209.000 a 208.000 las hectáreas cultivadas en 2018, no obstante, entre 2013 y 2016 el aumento fue de 128.500 hectáreas, aproximadamente.

 

Rechazo a la nueva presencia militar 

La oposición al presidente colombiano Iván Duque reclama que el anuncio de esta misión viniera por parte de la Embajada de EE.UU.  sino que se saltó la autorización del Congreso para el ingreso de estas tropas y exigió una explicación al Ejecutivo.

A esas valoraciones, hay que sumarle la oposición que ha generado por parte de líderes sociales, organizaciones y el propio Senado colombiano la llegada de las tropas militares estadounidenses al país suramericano, ya que podrían empeorar el problema en vez de mejorarlo.

Reportes de medios internacionales y analistas han vinculado en varias oportunidades la presencia de efectivos militares de EE.UU. en Colombia a un aumento de la prostitución de menores, a violaciones de mujeres, uso de la violencia y otros hechos delictivos. 

 La perpetuación de los esquemas de “guerra contra las drogas” de EE.UU.  en Colombia imposibilita una implementación efectiva de los Acuerdos de Paz, al tiempo que fortalece el tradicional rol del país sudamericano como irradiador de la seguridad hemisférica estadounidense en América Latina y el Caribe.


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