Argentina: El plan de Milei y la necesidad de una contraofensiva popular | Blog | teleSUR
16 diciembre 2023
Argentina: El plan de Milei y la necesidad de una contraofensiva popular

En menos de una semana la casta ultraderechista que se hizo con el Gobierno en Argentina ha mostrado cuáles son sus reales intenciones: declararle la guerra al pueblo para imponer un plan económico que nada tiene que envidiarle al que generó Alfredo Martínez de Hoz durante la dictadura militar. Recordemos que para que aquella se efectivizara,  tuvo que poner en marcha un aparato represivo de tal envergadura que provocó 30.000 desaparecidos y desaparecidas, y la destrucción de todo aquello que significara derechos humanos, soberanía y libertades esenciales.

Argentina: El plan de Milei y la necesidad de una contraofensiva popular

El ajustazo actual, anunciado primero por el presidente Javier Milei, y recibido con descerebrados aplausos, agitar de banderas yanquis e israelíes y vivas "a la policía" (sic) en Plaza Congreso, y luego, ratificado por el ministro Luis Caputo en una grabación televisiva, empujará a grandes sectores de la población a la extrema pobreza y la indigencia. Dicha política, significa una descomunal transferencia de ingresos para los sectores del capital más concentrado, y aumentar las carencias existentes a partir del acuerdo con el FMI. 

Con una macrodevaluación del 118 por ciento, la consecuencia inmediata ya la estamos viendo: una catarata de aumentos de todos los servicios esenciales, como luz, gas, agua, impuestos básicos. La eliminación de subsidios al transporte público provocará que a partir de enero, el boleto se vaya a 700 pesos y viajar en tren, a cualquier trabajador o trabajadora, le costará 1.100 pesos. Ni qué decir de la remarcación continua de los alimentos básicos y los medicamentos, que sin estas medidas ya tenían  precios desorbitantes y ahora se convertirán para amplios sectores directamente en impagables. A esto se le suma una encubierta rebaja de las ya de por sí exiguas jubilaciones, la dolarización de los alquileres, la reforma laboral y la amenaza de miles de despidos tanto en la administración pública como en los sectores privados. Sin duda, sobran empresarios revanchistas que aprovecharán la luz verde que les otorga este Gobierno para quitarse personal de encima, con distintas excusas.

Todo esto, sin duda, es recién el comienzo de un plan de aniquilamiento de cualquier tipo de conquista anterior, y como ocurriera a partir del golpe militar de 1976, solo podrá ser mantenido con represión. Para esto último, la sargenta Bullrich, a cargo del ministerio de (In)Seguridad, lanzó un protocolo que atenta contra el derecho constitucional a la justa protesta ante una agresión brutal como la que deviene de estas políticas de salvaje capitalismo. A la Bullrich se la conoce muy bien, es avezada en esto de provocar y dar palos a los de abajo. Solo basta recordar su actuación en anteriores Gobiernos de derecha, en el Ministerio de Trabajo hizo sangrar a las y los trabajadores, en Instituciones Penitenciarias generó una doctrina de doble castigo a los detenidos, y cuando estuvo a cargo de Seguridad durante el Gobierno de Macri, acumuló acciones de violencia estatal por montones. Fue precisamente en ese período que se produjeron los asesinatos de los militantes Santiago Maldonado y Rafael Nahuel, más innumerables casos de "gatillo fácil" policial, bajo su protección.

Milei, el ministro de Economía Caputo y su casta ultraliberal saqueadora, han sido colocados a dedo por las multinacionales, contando con el concurso de aquellos que los votaron, enojados por el fracaso del Gobierno neoliberal de Fernández y Massa, pero también engañados e intoxicados de tal manera por los medios, que prefirieron ajustar el nudo de la horca en sus cuellos que reflexionar sobre los males que ayudaban a instalar. Esa acción de "suicidio masivo"  puede llevarnos -si no nos rebelamos- puestos a todas y todos los que no comulgamos con la instalación del neofascismo en la Argentina. 

Por eso, se hace necesario repudiar la maniobra de los sectores financieros que se aprestan a consumar una de las ofensivas saqueadoras más brutales que ha vivido nuestro país. Vienen con todo y contra todos y todas.

Milei, Caputo y su casta han logrado, por culpa de este tipo de democracias corruptas y mentirosas, asaltar el Gobierno para tratar de imponer una dictadura institucional en toda regla. Así como Videla y sus secuaces corporizaron un golpe militar sangriento, ahora los seguidores de "La derecha avanza", procurarán hacer el mayor mal posible a punta de bombazos inflacionarios, convirtiéndose de hecho en terroristas económicos dispuestos a achicar y destruir el devaluado Estado actual, para suplantarlo por otro que solo beneficie a "la gente de bien", a la patria oligárquica tradicional y a los nuevos usureros de la especulación financiera. 

Como en los años más nefastos del conservadurismo, quieren un país de pobres e iletrados -de allí su embestida presupuestaria a la educación pública- que obedientemente acepten las directrices de los "iluminados" y enriquecidos nuevos saqueadores. Mientras ellos, que jamás pasaron penurias, que viven en pisos de millones de dólares, que están dispuestos a seguir destruyendo la tierra a punta de más extractivismo, que tienen a Washington y Tel Aviv como referencias internacionales, que comulgan con la extrema derecha latinoamericana, ellos, decimos, han decidido dar el golpe final para apoderarse de las riquezas de nuestro territorio.

Está claro que si se tiene un poquito de dignidad, hay que hacer todo lo posible para impedir que estas políticas depredadoras no se consoliden. Hay que evitar que se mancille la memoria de lucha de nuestro pueblo, que desde los anarquistas de principios del siglo XX, pasando por el 17 de octubre de 1945, los 17 años de resistencia peronista a las sucesivas dictaduras, el Cordobazo, la lucha revolucionaria de los 70 contra la dictadura militar y el Argentinazo del 2001, demostró que está dispuesto a enfrentar a los colonizadores y saqueadores.

Milei, Caputo y su casta quieren destruirnos como pueblo. Estará en nosotros dejar o no que lo consiga. Si frente a este ajustazo brutal, no se generan las condiciones para hacer oír las voces y acciones de rechazo, el plan del actual Gobierno va a seguir avanzando hasta cerrar el círculo de su receta de despojo.

Se hace necesario cerrar filas con todas y todos los que se opongan a que Argentina siga siendo una colonia más del continente. Es fundamental  recuperar la iniciativa y desobedecer todo aquello que atente contra los derechos conquistados. No son tiempos de ahondar la fragmentación que existe en el campo de la izquierda, sino de construir el antídoto que logre frenar a la ultraderecha y genere un escenario favorable para que de una vez por todas gobiernen quienes representen, de verdad, los intereses populares.  


teleSUR no se hace responsable de las opiniones emitidas en esta sección




Perfil del Bloguero
Periodista argentino en medios de prensa escrita y digital, radio y TV. Escritor de varios libros de temas de política internacional. Director del periódico Resumen Latinoamericano. Coordinador de Cátedras Bolivarianas, ámbito de reflexión y debate sobre América Latina y el Tercer Mundo.
Más artículos de este bloguero



Comentarios
0
Comentarios
Nota sin comentarios.