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El semanario satírico publicó una caricatura del presidente turco Recep Tayyip Erdongan.
Turquía empleará todos los recursos legales y diplomáticos necesarios para responder en contra de una caricatura del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, publicada en fecha reciente por la revista francesa Charlie Hebdo, en medio de una polémica entre Francia y la comunidad musulmana en el mundo.
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"Turquía tomará todas las medidas legales y diplomáticas necesarias en respuesta a una caricatura del presidente Tayyip Erdogan en el semanario satírico francés Charlie Hebdo", señaló la presidencia turca este miércoles en un comunicado enviado a los medios.
"Nuestra lucha continuará hasta el final, de una forma sana pero decidida, ante estas medidas maliciosas e insultantes", añadió la nota.
President @RTErdogan: “The principles, which are called the European values and dictated to the entire world, are being violated by the very people preaching them.” pic.twitter.com/LELKcSr5QS
— Turkish Presidency (@trpresidency) October 28, 2020
Las autoridades turcas han expresado su indignación al condenar por “falta de moral” lo que consideran que es un “esfuerzo repugnante” para “difundir su odio y racismo cultural” por parte de la revista satírica.
Los medios estatales informaron más tarde que los fiscales turcos habían iniciado una investigación sobre los ejecutivos de Charlie Hebdo.
“Nuestro pueblo no debe tener ninguna duda de que se tomarán todas las medidas legales y diplomáticas necesarias contra la caricatura en cuestión".
"Nuestra batalla contra estas medidas groseras, mal intencionadas e insultantes continuará hasta el final con razón pero determinación”, señaló el departamento de Comunicación de la presidencia turca.
La publicación de las caricaturas satíricas sobre Mahoma y la portada dedicada esta semana a Erdogan han elevado las tensiones políticas entre París y Ankara.
El presidente turco también ha acusado a su homólogo francés, Emmanuel Macron, de ser "hostil" en general con los musulmanes por reprobar el "separatismo islamista".
Las declaraciones del mandatario han sido rechazadas en el mundo musulmán con varias protestas registradas en países árabes.
Al respecto, el Gobierno francés destacó que, "pese a las intimidaciones", Francia "no renunciará jamás a sus principios y sus valores, en particular a la libertad de expresión y a la libertad de publicación".
