Sector Democrático Popular rechaza diálogo con Gobierno haitiano

El Sector Democrático y Popular (SDP), agrupación integrada por partidos moderados, radicales y organizaciones sociales en Haití, se negó este sábado a establecer diálogo con el Gobierno, en medio de la aguda crisis sociopolítica que vive el país.

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En un comunicado de prensa el SDP expresó que se quedó consternado “al enterarse de la masacre perpetrada en Bel Air por los bandidos de la organización Criminal llamada G9 familias y Aliados en la tarde del 01 de abril de 2021”.

Al responsabilizar también al presidente de Haití Jovenel Moise, esta plataforma precisó que “la población haitiana, en particular los barrios desfavorecidos, sigue siendo presa de estos grandes depredadores del derecho a la vida”.  

Asimismo la organización denunció el secuestro de un pastor y varios fieles de una iglesia en la comuna sur de la capital, en una Iglesia Adventista en Diquini el pasado 1 de abril donde los secuestradores realizaron el delito sin ninguna preocupación.

Estos hechos han propiciado que el Sector Democrático y Popular considere a la Policía Nacional de Haití como una institución capaz de perseguir a los opositores políticos y a los sindicalistas, sin poder hacer nada para localizar a bandidos y liberar a las víctimas del secuestro, según precisaron medios locales.

Al respecto de un diálogo con esta plataforma el presidente Juvenal Moise no ha emitido desde su cuenta en Twitter ninguna consideración. Solo el pasado 24 de marzo el presidente haitiano desde dicha red social expresó que “no podemos negar las tensiones y las diferencias, existen. Lo importante es saber gestionarlos, mirarlos a la cara y asumirlos. En unidad, en un diálogo honesto y sincero”, dijo.

Centenares de mujeres haitianas se manifestaron en las calles de la capital este sábado en contra del referéndum que impulsa el presidente Jovenel Möise, dirigido a refrendar la redacción de una nueva Constitución.

Sobre la Nueva Constitución desde Twitter, el mandatario haitiano refirió que la Carta Magna de 1987 “consagró muchos logros, pero ha tenido su día. Debemos tener el coraje de adoptar otro que, a través de arreglos futuristas, conducirá a Haití a un régimen político más equilibrado con menos probabilidades de causar inestabilidad”, insistió Juvenal Moise.

 Sabine Lamour, coordinadora de la plataforma Solidaridad de la Mujer Haitiana, acotó ante medios locales el sábado que los últimos decretos emitidos por el gobernante redujeron todas las instituciones republicanas a su más simple expresión, para construir un poder personal basado en la violencia de las bandas armadas, con el apoyo de la comunidad internacional.