La investigación contemplará una muestra de 150 personas y culminará sus primeras dos fases en marzo de 2022.
El Ministerio de Salud de Rusia aprobó este lunes la realización de investigaciones para combinar los fármacos de Sputnik Light y AstraZeneca para combatir contra la pandemia del coronavirus.
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Con una muestra de 150 personas arrancaron este lunes la primera y segunda fase de investigaciones, las cuales contemplan que los participantes reciban primero la vacuna AstraZeneca, y luego la primera inyección de Sputnik V 29 días después. La culminación de esta primera etapa se proyecta para el 2 de marzo de 2022.
Por su parte el Fondo Ruso de Inversión Directa (Rdif), señaló en un comunicado que actualmente desarrolla ensayos clínicos conjuntos para combinar el primer componente de Sputnik V, la vacuna Sputnik Light, con vacunas de otros fabricantes extranjeros.
Sputnik V was the 1st vaccine cocktail in the world when created by the Gamaleya Center in April 2020. It uses heterogeneous boosting with 2 shots by 2 different adenoviral vectors Ad5 & Ad26 which creates more robust immune response than vaccines using same component as booster.
— Sputnik V (@sputnikvaccine) July 26, 2021
"En particular, la vacuna Sputnik Light se puede utilizar en combinación con otras vacunas para aumentar su eficacia, incluso contra nuevas variantes que aparecen como resultado de la mutación del virus", pormenorizaron.
El ciclo de ambos fármacos contempla la administración de dos dosis, una inicial y otra de refuerzo, pero Sputnik V utiliza diferentes vectores virales para sus dos inyecciones, consistentes en el empleo de virus modificados inofensivos como vehículos o vectores para transportar información genética que ayuda al cuerpo a desarrollar inmunidad contra futuras infecciones.
En mayo pasado el Ministerio de Salud de Rusia, ante la falta de documentos e información necesarios para sacar conclusiones sobre la eficacia y seguridad de la vacuna combinada, se había negado a aprobar dichos ensayos clínicos, los cuales en humanos ya habían recibido el visto bueno en Azerbaiyán, los Emiratos Árabes Unidos, Bielorrusia y Argentina.