El Congreso de EE.UU. estará dividido en los próximos dos años con Senado demócrata y Cámara Baja republicana.
El Partido Republicano de los Estados Unidos (EE.UU.) logró este miércoles el escaño 218 y con ello la mayoría en la Cámara de Representantes del Congreso, por lo que controlará la legislación fiscal y el presupuesto de ese país durante los próximos dos años, informaron medios de prensa.
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De acuerdo con los reportes, los resultados de escrutinios pendientes desde las elecciones de medio término el pasado 8 de noviembre arrojan preponderancia incontestable para los republicanos, quienes tendrán la capacidad de dificultar la agenda legislativa del presidente Joe Biden a partir de enero, cuando comience la nueva legislatura.
La victoria republicana fue menos aplastante de lo esperado, pero probablemente someterá a la Casa Blanca a investigaciones implacables, señalan medios internacionales de comunicación.
Republicans have officially won a very narrow and likely unmanageable House majority. Thank you to everyone who put in the work in the midterms and kept the House so close. You’ve made the difference in making it very difficult for House Republicans to do what they wanted to do.
— Palmer Report (@PalmerReport) November 16, 2022
Igualmente aseguran que este resultado pondrá fin al segundo mandato en la Cámara Baja de la demócrata Nancy Pelosi y ya los opositores nominan como sustituto para el cargo al actual líder de la minoría, Kevin McCarthy.
Sin embargo, los demócratas retuvieron la mayoría del Senado con posibilidad de afianzarla en segunda vuelta durante las elecciones programadas para el estado de Georgia el próximo 6 de diciembre.
El Congreso de Estados Unidos quedará dividido, después de que los demócratas lograron controlar el Senado y los republicanos se quedaron con la Cámara de Representantes.
— Hannia Novell نوفيل (@HanniaNovell) November 17, 2022
Por el momento los demócratas cuentan con 210 escaños, 11 menos que en los comicios anteriores, aunque aún restan plazas por asignar.
A pesar de esta derrota, recientemente Biden calificó al 8 de noviembre como “un buen día para la democracia” en EE.UU. y destacó los resultados como un desafío para los pronósticos.
“Si bien la prensa y los expertos predijeron una gigante ola roja (por una supuesta mayoría republicana), no sucedió”, enfatizó.