Cada año, los palestinos reclaman al Estado de Israel la repatriación de los restos de los palestinos muertos en combate.
La reclamación de muchas familias palestinas que no pudieron dar sepultura a sus seres queridos caídos en combate contra el Ejército de ocupación israelí, ni conocen el paradero exacto de sus restos, se conmemora en el Día Nacional para la Recuperación de Cuerpos de los Mártires, cada 27 de agosto.
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De acuerdo a los palestinos, se encontrarían los cuerpos de más de 330 palestinos muertos en choques con el Ejército sionista, sepultados en cementerios militares o apilados en morgues y retenidos por Israel, sin funerales ni despedidas de sus familiares.
Hay cientos de familias afectadas porque el Estado de Israel aplica desde los años sesenta una política de confiscación de cadáveres palestinos que grupos de derechos humanos y críticos consideran un castigo colectivo contrario a la ley humanitaria internacional.
As the families of martyrs, activists, and supporters, we call on people of conscious around the world to stand with us on the National Day of Martyrs and demand our children return to us for burial.
— JLAC Advocacy (@AdvocacyJlac) August 21, 2021
Según la experta legal e investigadora palestina del Centro de Derechos Humanos y Ayuda Legal de Jerusalén (JLAC), Budour Hassan, esas prácticas significan que las familias tienen una herida abierta y un dolor sin cerrar al no poder enterrar ni decir adiós a sus seres queridos.
El JLAC representa a familias ante los tribunales de justicia israelí para pedir la entrega de los cuerpos retenidos, hace seguimiento en detalle de esta política y, una década atrás, inició una campaña para exigir el fin de esas prácticas.
Israel, en el marco de la guerra de ocupación de Palestina, mantiene esta política en base a una regulación de emergencia de la época del Mandato Británico (1922-1948) la cual fue validada formalmente por el Tribunal Supremo israelí en 2019.
Denying dignity to the dead is one of the gravest violations of human rights, and yet Israel continues to act with impunity.
— JLAC Advocacy (@AdvocacyJlac) August 21, 2021
We demand the right to bury our children and to practice one of the most fundamental aspects of the human condition: the right to mourn.
Desde 1964, las autoridades sionistas enterraron en cementerios militares a más de 400 personas que murieron en enfrentamientos o incidentes violentos con Israel.
Según Hassan, Israel busca usar los cuerpos como moneda de cambio en una eventual negociación sobre un intercambio de prisioneros con Hamás, pese a que gran parte de las víctimas no pertenecían al grupo.