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Como es costumbre, previo a la culminación de la marcha multitudinaria, los asistentes dijeron presente luego de cada nombre de desaparecido o asesinado mentado.
La Marcha del Silencio en reclamo a la justicia para las víctimas de la dictadura cívico-militar de Uruguay, entre el año 1973 y el 1985, aconteció este viernes luego de dos años sin realizarse debido a la pandemia de la Covid-19.
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Previo a la culminación de la marcha multitudinaria, los asistentes dijeron presente luego de cada nombre de desaparecido o asesinado mentado, y escucharon el himno nacional.
Convocando a este evento, la organización de Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos y Desaparecidos escribió en redes sociales que este 20 de mayo “al igual que los demás días del año, Todos Somos Familiares. Volveremos a marchar en silencio, sin banderas ni consignas partidarias, reclamando ¿Dónde están? La verdad sigue secuestrada: Es responsabilidad del Estado”.
Miles de uruguayos y uruguayas participan del 27 marcha del silencio que sigue reclamando verdad, justicia y memoria para los crímenes cometidos por el terrorismo de estado. @teleSURtv pic.twitter.com/8rEa4svuig
— Mateo Grille (@mateoteleSUR) May 20, 2022
Este ente, principal organizador de la marcha, brindó este 19 de mayo una conferencia de prensa en la que insistió en su reclamo a buscar la verdad y justicia y recalcaron que el Estado fue quien cometió esos crímenes y es él quien prosigue en el silencio.
Así se refirieron a las Fuerzas Armadas, que luego de tantos años continúan manteniendo clasificados los archivos con todos los detalles de las operaciones realizadas durante la dictadura, y el poder Ejecutivo y el ministro de Defensa tienen el poder de exigir que salgan a la luz los pormenores.
El 20 de mayo fue elegido como la fecha en la que miles de personas recorren la principal avenida de Montevideo para reclamar por justicia y verdad para las víctimas de la dictadura; en recordación al asesinato ese propio día de 1976 de los entonces legisladores Zelmar Michelini y Héctor Gutiérrez Ruiz, y los militantes Rosario Barredo y William Whitelaw.
La marcha llevaba dos años sin realizarse de forma presencial debido a la expansión de la pandemia de Covid-19; sin embargo, la convocatoria en redes sociales fue abrumadora y se registraron miles de post en las diferentes plataformas con imágenes y publicaciones alegóricas con símbolos como el de la margarita con un pétalo de menos.
