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Entre los departamentos con alerta amarilla están de Francisco Morazán Comayagua, La Paz, Lempira, Intibucá, Copán, Ocotepeque, Santa Bárbara, Cortés y Yoro.
Autoridades hondureñas anunciaron este jueves que se extienden las alertas amarilla y verde declaradas en los respectivos departamentos del país ante las intensas lluvias que afecta al territorio por sistema de baja presión.
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En un boletín, la Secretaría de Estado en los Despachos de Gestión de Riesgo y Contingencias Nacionales (Copeco) precisó que la alerta amarilla, la cual es de vigilancia, se regirá por 48 horas más en los departamentos de Comayagua, La Paz, Lempira, Intibucá, Copán, Ocotepeque, Santa Bárbara, Cortés y Yoro.
"Además Copeco decidió elevar a este nivel de alertamiento a Francisco Morazán, por la continuidad de las fuertes lluvias que genera el sistema de baja presión en el territorio nacional", refirió el ente.
�� Boletín de Alerta No. 048-2022
— Copeco Honduras (@CopecoHonduras1) September 1, 2022
Copeco suma a Alerta Amarilla a Francisco Morazán y extiende los mismos niveles en todo el país pic.twitter.com/mLTPPhUNO5
Asimismo, acotó que "se amplía por el mismo período la alerta verde para los restantes ocho departamentos que comprenden: Atlántida, Colón, Islas de la Bahía, Olancho, Gracias a Dios, El Paraíso, Choluteca y Valle".
Las autoridades prevén que las lluvias continuarán en horas de la noche, con mayor intensidad sobre la región sur (Choluteca-Valle) y Occidente (Lempira, Copán), mientras no suprimen la posibilidad lloviznas en la capital.
Por su parte, el Centro de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos) proyectó que el sistema de baja presión favorece la convergencia de viento y humedad proveniente del mar Caribe y el océano Pacífico, lo que genera nubosidad, lluvias y chubascos con actividad eléctrica.
En este sentido, el Cenaos confirmó que el Sistema de Alerta Temprana y los entes de primera respuesta, así como el Centro de Estudios del Valle de Sula (norte), continúan “en constante monitoreo y observancia de las crecidas de los ríos Ulúa y Chamelecón sobre el Valle de Sula y municipios aledaños”.
