Alertan sobre agravamiento de la crisis humanitaria en Colombia

Varias organizaciones gremiales y de defensa de los Derechos Humanos, así como personalidades de la vida pública de Colombia se pronunciaron este fin de semana en denuncia del agravamiento de la crisis humanitaria que persiste en el país suramericano.

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Mediante comunicados conjuntos y a través de las redes sociales, los denunciantes se han referido, concretamente, a la situación imperante en el Departamento Norte de Santander y, especialmente, en la Región del Catatumbo perteneciente a este.

Los documentos publicados son firmados, entre otros, por la Asociación Campesina del Catatumbo (Ascamcat), la Asociación de Personeros del Departamento (APD) y la Secretaría de Víctimas Departamental (SVD), la Red Departamental de Derechos Humanos (Rddh); así como por el ex presidente Ernesto Samper y los legisladores Griselda Lobo, Antonio Sanguino y Pablo Catatumbo Torres Victoria.

En ellos se ha referencia a los recientes hechos violentos ocurridos en la vereda Totumito-Carbonera, Región del Catatumbo, donde el grupo paramilitar los rastrojos asesinó en días pasados a ocho campesinos, a los que previamente torturó. Entre los fallecidos se encontraba un dirigente zonal de la Ascamcat.

Este hecho, según el comunicado, provocó el desplazamiento de unas 700 personas que actualmente están varadas en una escuela de la localidad, lo cual es el resultado del terror que se vive por hechos como estos.

Recuerda el documento que, 14 días antes de la masacre de Tortumito - Carbonera, otros seis campesinos de la región habían sido torturados y arrojados al río Zulia, luego de ser desmembrados.

Denuncian también la ausencia total de presencia de la fuera pública en la región, lo que permite que este y otros grupos armados irregulares mantengan la disputa por el control de la zona a través de choques armados, que no son enfrentados en forma alguna por las instancias gubernamentales.

Los denunciantes hacen mención a que en lo que va de año 2020, según las estadísticas oficiales, en la ciudad de Cúcuta, capital departamental, el homicidio ha aumentado un 14 por ciento en comparación con el año pasado y hasta el viernes pasado habían ocurrido 115 muertes violentas.

Situación que se ha extendido a los municipios de Área Metropolitana y especialmente a la zona rural donde se libra una fuerte guerra entre los distintos actores del conflicto armado que sigue afectando la zona.

Sólo entre los meses de febrero y marzo pasados, más de 20.000 personas residentes en los municipios de Hacarí, La Playa de Belén y Ábrego se vieron afectados por los combates entre os grupos armados irregulares, ejemplifica el documento.

Los denunciantes demandan del Gobierno que actúe para poner fin al conflicto armado y que garantice la vida y la seguridad de los pobladores de la Región y el departamento.