De acuerdo con las autoridades chinas, la situación general de la epidemia está bajo control y desarrolla una perspectiva positiva.
El gobierno provincial de Shandong confirmó este jueves que 207 personas se han contagiado de la infección COVID-19 en el centro penitenciario de la localidad china.
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Entre los afectados se encuentran 200 presidarios y siete funcionarios que laboran en la prisión.
De acuerdo con las declaraciones de las autoridades locales, este brote de la infección COVID-19 se ha producido también en otros centros penitenciarios ubicados al este de China.
Tras confirmarse los casos de infección, a través de las pruebas de ácido nucleico, se ha iniciado un proceso de aislamiento y tratamiento a las personas afectadas.
Comité Nacional de Sanidad de #China���� informa que han disminuido la cifra de casos de contagios con el virus Covid-19 del 4 al 11 de febrero https://t.co/FnbuQ9gcw5
— teleSUR TV (@teleSURtv) February 12, 2020
La proporción de pacientes que se han recuperado de la neumonía causada por el agente patógeno aumentó al 10.6% pic.twitter.com/aY97jxDZVY
Tanto el Ministerio de Justicia como la Comisión de Asuntos Políticos y Jurídicos del Comité Central del Partido Comunista de China prestan especial atención a los casos de COVID-19 encontrados en la prisión de Rencheng.
Por el momento, la Comisión Nacional de Salud (CNS) de China se mostró entusiasta ante la tendencia positiva de la evolución epidemia de COVID-19.
El subdirector de la CNS, Zeng Yixin, señaló que en la provincia de Hubei, epicentro de la infección, los casos de contagio han ido disminuyendo considerablemente.
El Gobierno chino avanza en la aplicación del tratamiento con plasma a los pacientes detectados con el virus. Lo que ha generado una disminución de la cifra de casos sospechosos de 2.211 el pasado 6 de febrero a 335 este jueves.