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El gabinete de Jeanine Añez, ella misma incluida, se encuentra bajo investigación por diversas causas relacionadas con el Golpe de Estado de 2019.

El gabinete de Jeanine Añez, ella misma incluida, se encuentra bajo investigación por diversas causas relacionadas con el Golpe de Estado de 2019. | Foto: Twitter: Diputados Bolivia

Publicado 18 junio 2021



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Según audios del entonces ministro de Defensa del Gobierno de facto, se intentó impedir la asunción del presidente Arce.

Audios filtrados en Estados Unidos y que pertenecerían al ministro de Defensa del Gobierno de facto de Jeanine Añez (2019-2020) en Bolivia, muestran la preparación de una convulsión social en las vísperas de la asunción del presidente Luis Arce luego de ganar las elecciones.

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Las conversaciones habrían transcurrido en noviembre de 2020, días antes de la asunción de Luis Arce Catacora como presidente de Bolivia y muestran la llegada de hasta 10.000 mercenarios estadounidenses para dar un nuevo golpe de Estado, aliados con la Policía y las Fuerzas Armadas locales.

Fue a través de un boletín de investigación del portal "The Intercept" quien revisó grabaciones telefónicas y correos electrónicos intercambiados entre Luis Fernando López, un exadministrador civil del Ejército de Estados Unidos y un exsargento estadounidense de origen boliviano.

En una de las grabaciones filtradas, una persona identificada como el ministro de Defensa boliviano dijo que estaba "trabajando para evitar la aniquilación de mi país". Las fuerzas armadas y el pueblo tenían que "levantarse", agregó, “y bloquear una administración de Arce. ... Las próximas 72 horas son cruciales ".

Nunca se ejecutó, y varios altos funcionarios del gobierno saliente huyeron de Bolivia o fueron arrestados por cargos separados relacionados con la corrupción y su presunto papel en el golpe de 2019.

No obstante, López dejaba claro que las Fuerzas Armadas apoyaban su idea: "El alto mando militar ya está en conversaciones de apronte. El mensaje de la lucha está en que quieren reemplazar a las FF.AA. y a la Policía por milicias cubanas y venezolanas. Esto va a permitir que Bolivia se levante nuevamente y no permita el Gobierno de Arce", se escucha en los audios.

En ese momento, el comandante de las Fuerzas Armadas era Sergio Orellana, designado por la presidenta de facto Jeanine Áñez (2019-2020), quien se encuentra presa desde hace tres meses, acusada de varios delitos en el marco del golpe contra Morales.

Orellana huyó del país antes de la asunción de Arce. Lo mismo López, quien el 5 de noviembre de 2020 habría huido a Brasil, donde se perdió su rastro.

Esta denuncia se une a la detención de Arturo Murillo en Florida, Estados Unidos, en mayo pasado acusado de haber malversado 5,6 millones de dólares que le habían dado para comprar materiales represivos para la Policía.


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