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La OCI exige también al gobierno de Tel-Aviv que retire sus fuerzas armadas de las zonas palestinas ocupadas en 1967.
La cumbre de países islámicos manifestó este sábado su apoyo a los palestinos y llamó a boicotear a los países que trasladen su embajada a Jerusalén, luego que Estados Unidos inauguró en mayo pasado su legación en la ciudad santa.
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En un comunicado divulgado tras el encuentro, en la ciudad santa de La Meca, la cumbre de la Organización para la Cooperación Islámica (OCI) denunció el traslado de la embajada estadounidense a Jerusalén, que Washington reconoció como capital de Israel.
El encuentro de la OCI, que cuenta con 57 países miembros que representan a 1.500 millones de musulmanes, hizo un llamado al "boicot" de los países que abrieron embajadas en Jerusalén.
#OICMakkahSummit called for the full withdrawal of #Israel from the occupied #Syrian #Golan to the borders of 4 June 1967, in accordance with Security Council resolutions 242 (1967) and 338 (1973), the principle of land for peace & Madrid Peace Conference &Arab Peace Initiative. pic.twitter.com/Efs47mb9B5
— OIC (@OIC_OCI) 1 de junio de 2019
Israel anexionó la parte Este de la ciudad, que la comunidad internacional considera un territorio ocupado. Los palestinos quieren hacer de esa parte de la ciudad la capital del Estado al que aspiran.
Una idea que desde siempre ha contado con el apoyo de la OCI, una organización fundada para defender los lugares santos musulmanes de Jerusalén tras el incendio, de carácter criminal, de la mezquita Al Aqsa en agosto de 1969.
La OCI exige también al gobierno de Tel-Aviv que retire sus fuerzas armadas de las zonas palestinas ocupadas en 1967, como única forma de alcanzar la paz, al tiempo que condena el reconocimiento de la meseta siria del Golán como territorio israelí por parte de Washington.
Por otra parte, la Conferencia de la OCI en Arabia Saudita se convirtió en una escena de cruce de acusaciones de los saudíes contra Irán.
El rey Salman acusó a Irán de apoyar a los saboteadores. Teherán por su parte rechazó las acusaciones, enfatizando que no busca confrontaciones y dijo que está abierto a estrechar lazos bilaterales si Riad cambia su retórica.
El sábado en La Meca, Arabia Saudita volvió a acusar a Irán de apoyar a los grupos saboteadores. Por su parte, el ministro saudí de Estado para Asuntos Exteriores, Adel al-Yubeir, dijo que las palabras del monarca dieron un mensaje claro a Irán.
Al amparo de uno de los días más sagrados del Islam -el último viernes de Ramadán- el rey Salman organizó una triple cita internacional -islámica, árabe y del Golfo Pérsico- (El Consejo de Cooperación del Golfo y la Liga Árabe) con el objetivo implícito de alinear al mundo musulmán contra Teherán, pero fracasó en forma parcial en su intento de condenar al régimen iraní.
Salman convocó a cumbres de emergencia de líderes del Golfo y luego a los líderes árabes para discutir los ataques con drones en instalaciones petroleras en Arabia Saudita.
