¿Cuál es la situación de Venezuela ante la visita de Bachelet?

La visita de la alta comisionada para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, a Venezuela este miércoles ocurre en medio del asedio económico, que inició desde diciembre de 2014 por parte de Estados Unidos (EE.UU.), y mientras continúa la campaña internacional para denunciar las consecuencias de las sanciones.

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Bachelte llega a Venezuela para una visita oficial del 19 al 21 de junio, tras aceptar la invitación hecha por el presidente Nicolás Maduro el pasado 8 de noviembre. El 21 de diciembre la alta comisionada aceptó la invitación, pero antes envió una delegación de 5 funcionarios de la oficina de Derechos Humanos de la ONU, con el objeto de preparar las condiciones antes de su llegada al país.

La visita de la funcionaria se da un contexto económico muy complejo ante el bloqueo económico y financiero de EE.UU., la campaña internacional para denunciar sus consecuencias y el reforzamiento de programas sociales para atender a la población afectada.

También está el complicado escenario político debido a la persistencia de los intentos golpistas de la oposición venezolana mediante actos de violencia y desestabilización. Asimismo, Juan Guaidó, el autoproclamado "presidente encargado", y su grupo más cercano están envueltos en una trama de corrupción que involucra el robo de fondos del Estado y desvío de dinero enviado por EE.UU. para el manejo de la supuesta "ayuda humanitaria".

Además, Bachelet llega al país suramericano en medio de la creciente cooperación del Estado venezolano con distintas agencias del sistema de Naciones Unidas, al igual que con la Cruz Roja y Media Luna Roja para garantizar los derechos humanos de la población.

Bloqueo de EE.UU.

El Gobierno de EE.UU. ha aplicado un conjunto de sanciones coercitivas unilaterales, que han derivado en un bloqueo económico y financiero, que hasta la actualidad restringe el acceso a alimentos, medicinas, bienes básicos y financiamiento. La situación económica del país ha sido impactada negativamente desde entonces con graves efectos para la población.

El bloqueo afecta directamente el funcionamiento social y económico de Venezuela, pues limita la capacidad del Estado venezolano para realizar importaciones de medicamentos y alimentos, así como el uso de la banca internacional para operaciones comerciales diversas.

Hasta ahora, las medidas coercitivas unilaterales han generado pérdidas por 24.258 millones de dólares. Adicionalmente, existen en la actualidad más de 5.470 millones de dólares ilegalmente bloqueados en la banca internacional que estaban destinados a la adquisición de alimentos y medicinas. 

La nación ha sido especialmente golpeada por el bloqueo de activos financieros, capital, filiales y empresas asociadas a estatales venezolanas, principalmente la estatal Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA) y sus filiales, como CITGO, la cual posee tres refinerías en Estados Unidos.

La situación se agrava tras descubrirse que los recursos de CITGO han sido robados por dirigentes de la oposición venezolana, a la cual EE.UU. entregó el control de la filial. 

“Me acaban de llegar los datos frescos que señalan que es muy probable que el Departamento de Justicia de EE.UU. abra la averiguación Ad Hoc a la junta directiva espúrea que Guaidó nombró en la empresa Citgo, porque alteraron la contabilidad para excederse en 70 millones de dólares en el pago de intereses”, confirmó el 17 de junio el ministro del Poder Popular para la Comunicación e Información (MinCI), Jorge Rodríguez.

Además, Rodríguez indicó que la persona que se apropió de los 70 millones de dólares de excedentes sería  Carlos Vecchio, nombrado por Juan Guaidó como "embajador" de Venezuela en Washington.

Campaña internacional contra el bloqueo

Este 18 de junio el ministro del Poder Popular para el Proceso Social del Trabajo, Eduardo Piñate, denunció ante la 108° Conferencia Internacional del Trabajo (Suiza) la agresión de EE.UU. y sus aliados contra Venezuela.

Asimismo, el pasado 14 de junio los trabajadores venezolanos denunciaron ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que el bloqueo económico y financiero ha generado un boicot comercial contra el país.

La batalla también se realiza en redes sociales con "tuitazos" mundiales, con las etiquetas #TrumpDesbloqueaVenezuela y #TrumpUnblockVenezuela, para denunciar el bloqueo de EE.UU. contra Venezuela. 

Las actividades se enmarcan en la campaña internacional lanzada en mayo pasado para denunciar la ilegalidad de las sanciones de EE.UU. y sus consecuencias en la población. 

Incremento de protección social

El objetivo del bloqueo es sumir al país en una profunda crisis económica y así forzar un cambio de gobierno. Ante esto, el Gobierno venezolano ha empleado una serie de medidas de protección social, mientras busca alternativas de lazos económicos con otras naciones del mundo. 

De hecho, el Gobierno venezolano lanzó el Plan de Atención Integral de las Victimas de la Guerra Económica para brindar ayuda oportuna la población más afectada por las consecuencias de las sanciones. En el marco de esta medida, el Movimiento Somos Venezuela se encarga de la identificación y captación de los ciudadanos en situación vulnerable (situación de calle).

La estrategia de protección social incluye la distribución de alimentos a través de los programas CLAP y el sistema de asignaciones de ayudas monetarias del Carnet de la Patria. 

Cooperación con ONU y Cruz Roja

El Gobierno de Venezuela ha incrementado significativamente la cooperación con agencias de Naciones Unidas para garantizar los derechos humanos de la población ante la situación económica del país. En este sentido, trabaja con la ONU en un Plan especial de Respuesta en materia de salud, alimentación, educación, agua y saneamiento para los sectores más vulnerables.

Aunado a esto, Venezuela recibió este 18 de junio el segundo cargamento de asistencia técnica humanitaria con 24 toneladas de medicamentos e insumos médicos por parte de la Cruz Roja y Media Luna Roja, en el marco del acuerdo de asistencia técnica humanitaria. 

A esta cooperación multilateral se le unen los mecanismos bilaterales con países como China, Rusia y Turquía que han permitido la llegada de 569 toneladas de medicamentos y material quirúrgico.