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Entre 500.000 y 600.000 colonos israelíes viven en asentamientos exclusivos para ellos en los territorios palestinos ocupados.
Al menos seis civiles palestinos resultaron heridos este viernes por balas recubiertas de goma, y otros 30 presentaron daños por inhalación de gases lacrimógenos, tras la nueva represión israelí en territorios de Cisjordania ocupada.
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En otra jornada de protestas contra la ocupación ilegal de Palestina por parte del régimen sionista, los uniformados dispararon contra los manifestantes en la aldea Kafr Qaddum, provincia cisjordana de Qalqilia, dejando un saldo de cuatro heridos por proyectiles, además de causando decenas de casos de asfixia por inhalación de gas.
La Media Luna Roja Palestina detalló que todos los heridos fueron asistidos al momento de la confrontación, y los heridos de bala trasladados a los centros hospitalarios más cercanos.
That's how #IsraeliApartheid ensures that generations of traumatized #Palestinian children will not forgive or forget. Censure #IsraeliCrimes, not Palestinian textbooks! https://t.co/8Cjzndwwmf
— Hanan Ashrawi (@DrHananAshrawi) May 4, 2022
Mientras, en la ciudad de Beita, provincia de Nablus, las fuerzas del régimen sionista hirieron a dos niños palestinos de 13 años de edad, impactados en sus extremidades, a los que también se añaden decenas de asfixiados por inhalación de gas lacrimógeno.
Estas manifestaciones de viernes en contra de la violación de derechos humanos que representa la expansión y construcción de asentamientos ilegales israelíes en suelo palestino se producen en Kafr Qaddum, Beita, y otras regiones de la Cisjordania ocupada desde hace años.
Se trata de una cifra entre los 500.000 y 600.000 colonos israelíes que habitan en asentamientos exclusivos para judíos como violación, además, a los postulados del derecho internacional.
La Suprema Corte israelí ordena expulsar a 1.300 palestinos en Cisjordania ocupada y la destrucción de sus hogares https://t.co/fP9wrBLeSe pic.twitter.com/HE9VLt0x6s
— Palestinalibre.org (@palestinalibre) May 6, 2022
El primer ministro palestino, Mohammad Shtayyeh, condenó la aprobación por parte del Gobierno de Israel de la construcción de 4.000 nuevas unidades de asentamiento en Cisjordania, así como la demolición de 12 pueblos rurales en la región de Masafer Yatta, sur de la provincia de Hebrón; y dijo que esta medida pudiera acarrear consecuencias.
"Estos planes constituyen una amenaza para la seguridad y la paz en la región, que se encuentra en estado de tensión debido a las políticas y prácticas de persecución, racismo y limpieza étnica aplicadas por el gobierno de ocupación contra el pueblo palestino", pormenorizó en un comunicado.
