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Las relaciones bilaterales entre Rusia y Ucrania se han deteriorado desde 2014, tras la realización del referéndum por la anexión de Crimea a Moscú.
El Gobierno de Rusia lamentó este lunes la postura de Ucrania tras negarse a renovar el Tratado de Amistad, Cooperación y Asociación entre ambos países, cumplido desde mayo de 1997 en aras de mantener las relaciones bilaterales.
Moscú afirmó que la decisión de Kiev al firmar la ley que da fin al tratado amistoso atenta e irrespeta los intereses del pueblo ucraniano.
"Solo podemos lamentar el hecho que la dirigencia ucraniana esté tomando estas decisiones tan apresuradas que, desde nuestro punto de vista, constituyen una manifestación de falta de respeto a su propio pueblo y sus intereses", aseguró el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov.
Peskov resaltó que pese a la disputa territorial por Crimea que persiste desde 2014, tanto Ucrania como Rusia comparten lazos fraternales, culturales relacionados con su gentilicio, por lo que es lamentable la ruptura del pacto.
El Parlamento de Kiev resolvió no renovar el tratado con Rusia, la moción fue aprobada con 277 diputados a través de un proceso de votación realizado el pasado 6 de diciembre del 2018. Asimismo, el mandatario de Ucrania, Petró Poroshenko, firmó este lunes la legislatura que impide la renovación del documento para el 2019.
En tanto, las tensión persiste y se ha intensificado luego que Rusia detuviera tres buques de Ucrania cerca del estrecho de Kerc, cerca del límite de la frontera rusa, lo que fue catalogado por el Kremlin como una provocación y violación.
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