Policía búlgara halla a 18 inmigrantes asfixiados en un camión

Al menos 18 inmigrantes, entre ellos un menor de siete años, murieron asfixiados dentro de un camión en el que presuntamente fueron abandonados por traficantes a unos 25 kilómetros de Sofía, la capital de Bulgaria.

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Según la Policía búlgara, en el interior del vehículo fueron encontrados 40 inmigrantes irregulares, de los cuales 18 habían muerto encerrados en un compartimento falso bajo una carga de madera. Otros doce aparecieron con vida fuera del camión.

El informe especifica que todos los inmigrantes hallados son del sexo masculino, con edades que oscilan entre los 15 y los 25 años y se especula que sean ciudadanos afganos.

Las autoridades investigan la causa de la muerte de los emigrados, entre ellos un niño de siete años, pues cabe la posibilidad de que la carga de madera se halla deslizado, aplastando a los que se encontraban debajo.

Por declaraciones de supervivientes se ha sabido que los traficantes de personas simplemente abandonaron al camión en camino rural muy poco transitado y escaparon, posiblemente, al cerciorarse de que algunos de los refugiados habían fallecido.

Los servicios de emergencia declararon que el resto de ocupantes del camión han sido trasladados a hospitales en Sofía y que 14 de ellos se encuentran en estado crítico, con síntomas de asfixia e hipotermia.

"No han recibido comida durante varios días, sufren de deshidratación y tienen heridas varias por todo el cuerpo, no puedo decir qué las ha provocado", dijo el ministro búlgaro de Sanidad, Asen Medzhidiev, tras visitar un centro asistencial donde se encuentran algunas de las víctimas.

"Suponemos que los inmigrantes fueron transportados desde la frontera entre Bulgaria y Turquía a la zona alrededor de la ciudad de Dragoman para cruzar luego a Serbia", remarcó.

Fuentes locales indican que las fuerzas de seguridad ya tienen bajo custodia a un sospechoso de estar vinculado a la muerte de los migrantes.

El territorio de Bulgaria forma parte de la ruta por la que inmigrantes y refugiados tratan de llegar a través de Turquía, Serbia y otros países balcánicos hasta países de Europa Occidental.

Pese a la existencia de una barrera de 234 km a lo largo de la frontera con Turquía, la policía búlgara afirma haber impedido la entrada de 164 000 personas en 2022 y de 55 000 en 2021.