La polémica rodeaba al exministro de Salud tras su dimisión hace 4 meses y su anuncio al frente de una agencia de la ONU.
El portavoz del secretario general de la Organización de Naciones Unidas, Stephane Dujarric, aseveró este domingo que el nombramiento de Matt Hancock, al frente de una organización regional "no saldrá adelante".
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Hancock se había desempeñado como secretario de Salud de Reino Unido y fue presentado el martes como representante especial de la ONU sobre Innovación Financiera y Cambio Climático para la Comisión Económica para África (ECA, por sus siglas en inglés), pero ahora su nombramiento se estancó.
La secretaria Ejecutiva de la Comisión Económica para África de Naciones Unidas, Vera Songwe, había justificado el nombramiento de Hancock por lo que llamó su hábil gestión de la respuesta a la pandemia de la Covid-19 en Reino Unido.
Honoured to be appointed United Nations Special Representative.
— Matt Hancock (@MattHancock) October 12, 2021
I’ll be working with the @UN @ECA_OFFICIAL to help African economic recovery from the pandemic and promote sustainable development.
Poco después, Hancock anunció la noticia de que sería el nuevo representante especial de la ONU en medio de una polémica en las redes sociales, donde muchos recordaron su dimisión al frente del Ministerio de Salud británico por incumplimiento de las normas de distanciamiento físico, tras ser fotografiado cuando besaba a su asistenta en la sede de la cartera en plena pandemia.
Hancock justificó que su renuncia se debió a lo que llamó una norma técnica de la ONU, según la cual los miembros del Parlamento británico no pueden ocupar ese cargo en el organismo internacional.
Matt Hancock has been sacked from his UN role before it even started
— Edward Hardy (@EdwardTHardy) October 16, 2021
UN spokesperson Stephane Dujarric: "Mr Hancock's appointment by the UN Economic Commission for Africa is not being taken forward" https://t.co/KCMhVaft9r
Sin embargo, el director de la organización de derechos humanos, Justicia Global Ya, Nick Dearden, se alegró de la renuncia y amplió que si Hancock quiere ayudar a los países africanos, debería empezar por asesorar al premier británico, Boris Jhonson, para retirar las patentes a las vacunas anticovid.
Dearden dijo que lo último que necesita el continente africano es lo que llamó un político británico fracasado.