Durante la primera visita de Lavrov a Estados Unidos en dos años, ambos funcionarios conversaron sobre temas internacionales coyunturales, como la postura ante situaciones en Venezuela o Irán.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo y el canciller ruso, Serguéi Lavrov se reunieron este martes en Washington en una reunión a puerta cerrada y sin acceso a la prensa, en la que intercambiaron puntos de vista sobre asuntos internacionales y temas de actualidad.
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Tras el encuentro, ambos funcionarios comparecieron ante la prensa, donde Lavrov invitó a Pompeo visitar Rusia cuando este estime conveniente, invitación que fue aceptada por el funcionario estadounidense.
El programa de visita de Lavrov a Washigton incluyó además, una reunión con el presidente estadounidense Donald Trump.
Al término de la reunión, Lavrov expresó que Rusia está dispuesta a contribuir a que las relaciones entre Estados Unidos y Corea del Norte avancen y superen el punto muerto en que se encuentran.
"No se puede exigir a Corea del Norte que haga todo de una vez, y solo después volver a la solución del problema de su seguridad, el levantamiento de sanciones etcétera", subrayó el diplomático ruso.
De igual forma, instó a Pionyang a la moderación y aseveró que la situación humanitaria en ese país requiere medidas urgentes, al tiempo que señaló que, a causa de las hostilidades, el país asiático enfrenta problemas de suministros de artículos, incluso aquellos no sancionados por Naciones Unidas y Estados Unidos ante el miedo de los suministradores internaciones.
�������� Llega a la Casa Blanca el canciller ruso, Serguéi Lavrov, donde Trump lo recibirá en el despacho Oval sin periodistas ni cámaras. Esto, el día que los demócratas presentaron cargos oficiales para el impeachment tras el #Ucraniagate y el #Rusiagate.
— Bricio Segovia (@briciosegovia) December 10, 2019
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Por otra parte, Rusia expresó que es necesario hacer todo lo posible por preservar el Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC) para garantizar el carácter pacífico de los estudios nucleares de Irán.
Asimismo, Lavrov manifestó su preocupación a Pompeo por la situación en el Golfo Pérsico y el estrecho de Ormuz.
The presser, following the meeting between Russian Foreign Minister Sergey Lavrov and Mike Pompeo, is over. Next, Lavrov will be meeting with Trump (no press allowed). pic.twitter.com/cyqVXNN1iJ
— Julia Davis (@JuliaDavisNews) December 10, 2019
El secretario de Estado norteamericano informó a la prensa, tras la reunión con Lavrov, que gran parte del tiempo la dedicaron a la cuestión en Ucrania. El canciller ruso informó a Pompeo sobre los resultados de la cumbre en formato de Normandía que reune a Rusia, Ucrania, Francia y Alemania sobre Donbás.
Lavrov señaló que la declaración final de la reunión la víspera en París reafirma el carácter vinculante de los Acuerdos de Minks, que sentaron las bases para la solución política del conflicto en Donbás.
Rusia dejó clara su posición respecto a Venezuela y abogó por que el pueblo venezolano decida su propio futuro de manera pacífica y basado en el diálogo.
"Rusia siempre aboga por que el pueblo venezolano determine su futuro y los orígenes del diálogo que se observaron en llamado formato de Oslo traigan los resultados necesarios, y la crisis se resuelva únicamente por vía pacífica", sostuvo Lavrov en la misma conferencia de prensa.
A su llegada a la Casa Blanca, la prensa pregunta a Serguéi Lavrov "¿debería Rusia mantenerse al margen de las elecciones de 2020?" y "qué asuntos va a tratar con el presidente?", a lo que el canciller ruso solo contesta "voy a decir buenas tardes al presidente".
— Bricio Segovia (@briciosegovia) December 10, 2019
Lavrov aprovechó la oportunidad para subrayar que aún no hay pruebas que demuestren las acusaciones a Rusia por supuestamente haber interferido en las elecciones presidenciales de Estados Unidos en 2016, ante especulación de una posible intervención rusa en los próximos comicios estadounidenses en 2020.
"Todas las alegaciones de nuestra injerencia son carentes de base, no hay pruebas, no hemos visto estas pruebas, nadie nos ha dado estas pruebas porque simplemente no las hay", manifestó el ministro ruso.
En este sentido, Moscú declaró estar dispuesta a publicar la correspondencia que mantuvo con Washington por canales cerrados entre 2016 y 2017 para demostrar que no existen pruebas de esta acusación.