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El presidente López Obrador intervino personalmente ante lo que consideró "un asunto urgente de atención a una violación de derechos humanos".

El presidente López Obrador intervino personalmente ante lo que consideró "un asunto urgente de atención a una violación de derechos humanos". | Foto: EFE

Publicado 11 diciembre 2020



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El joven encarcelado sin pruebas incriminatorias a lo largo de 13 años, fue víctima de la llamada guerra contra el narcotráfico.

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció este viernes la liberación de Rafael Méndez Valenzuela, detenido y encarcelado de forma injustificada desde enero de 2008.

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En su habitual conferencia de prensa matutina, el mandatario mexicano dio a conocer que el joven salió esta madrugada del penal de Guasave, estado de Sinaloa, ubicado en la costa pacífica del país latinoamericano. 

En su mensaje, López Obrador anunció que debió intervenir personalmente en el caso, por considerarlo "un asunto urgente de atención a una violación de derechos humanos".

 

La madre del joven detenido, la periodista Judith Valenzuela, había expuesto semanas atrás, en el espacio de la conferencia de prensa del Presidente, que su hijo fue apresado siendo inocente y permanecía encarcelado pesar de haber sido liberado en 2018. 

Durante la rueda de prensa de este viernes, la reportera agradeció al Presidente por su intervención, pues "gracias a su voluntad política de hacer las cosas bien, de hacer justicia, mi hijo ya está libre", dijo emocionada.

La tragedia de la llamada guerra contra el narcotráfico

Rafael Méndez Valenzuela fue apresado en 2008, bajo cargos de delincuencia organizada y tenencia ilegal de armas de fuego de uso exclusivo del Ejército. Su detención, practicada en la localidad Valle de Bravo (estado de México), tuvo lugar en el contexto de la llamada guerra contra el narcotráfico, decretada por el entonces presidente Felipe Calderón (2006-2012).

Su madre denunció que "cuando esa política federal (…) estaba en su apogeo en 2008, hubo muchas detenciones arbitrarias y torturas por querer justificarla, cuando no era así. Muchos jóvenes siguen encarcelados por eso, y nadie los voltea a ver", sostuvo.

 

 

El joven actualmente tiene 33 años y pasó encarcelado casi 13 de ellos sin una sola prueba incriminatoria de los cargos que le imputaron. Incluso, permanecía en prisión sin una sentencia definitiva.

Tras hacerse público el caso en las conferencias de prensa, López Obrador instruyó revisar el tema a la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero. Con posterioridad, el mandatario se dirigió a la Suprema Corte de Justicia de la Nación para intervenir en este caso.


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