Gobierno boliviano y maestros firman acuerdo de normalidad educativa

El Gobierno y la Confederación de Trabajadores en Educación Urbana de Bolivia (Cteub) suscribieron un acuerdo este viernes que pone fin a las protestas desarrolladas por ese sector y asegura la normalidad en las actividades académicas a partir del próximo lunes.

LEA TAMBIÉN:

Bolivia creará comisión para plantear temas de justicia laboral

El ministro de Educación de ese país, Edgar Pary, y la máxima directiva de Cteub rubricaron el convenio el cual establece que se responderá a las demandas de los hasta el próximo 20 de abril, luego de una serie de movilizaciones en la ciudad de La Paz que llegaron incluso, a enfrentamientos con policías; además de un paro de 24 horas, bloqueos y marchas en otras regiones.

Al respecto el documento rubricado sostiene que “el Ministerio de Educación asignó para la gestión 2022 unos 2.500 ítems y a exigencia del Cteub, se consolidan 800 ítems más, haciendo un total de 3.300 ítems de nueva creación con base en la capacidad financiera del Estado Plurinacional de Bolivia”.

En tal sentido el secretario ejecutivo de Cteub, Patricio Molina destacó que “a nombre de los maestros que han salido a las calles a luchar creemos que estamos en un avance y este convenio de ninguna manera vamos a decir que satisface todas nuestras expectativas, pero creemos que es un pequeño avance. Esperamos que se cumplan los acuerdos y que sigamos caminando en pro del beneficio de la educación”.

Entre las cuestiones significativas contenidas en el convenio resalta el hecho de que se destinarán más de 10.000 horas para las materias de física y química.

Añade el documento además que “ninguna autoridad educativa establecerá sanciones a maestros que se movilizaron. En el caso de unidades educativas que paralizaron actividades deberán reponer la jornada para que no haya ningún tipo de descuento”.

El Gobierno del Estado Plurinacional de Bolivia destina el 10.8 por ciento del presupuesto estatal a esta cartera que, al decir de su titular Pary, intentará cubrir con el acuerdo el déficit histórico que se arrastra desde la gestión de facto de Jeanine Áñez.