Con el estado de excepción se permiten las detenciones sin orden judicial y se hizo una reforma para castigar con hasta 45 años de prisión a integrantes de las pandillas.
El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, anunció la noche del sábado que prevé solicitar al Parlamento ampliar el estado de excepción por 30 días más, mediante el cual ha combatido a las bandas criminales que actúan en el país.
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“En este momento, estoy convocando al Consejo de Ministros para que solicite a la Asamblea Legislativa, la ampliación del régimen de excepción por 30 días más”, publicó Bukele en Twitter cerca de la medianoche de este sábado.
De acuerdo con el mandatario, más de 15.000 terroristas fueron capturados en solo 27 días de aplicación del régimen de excepción, como parte del operativo denominado “Guerra contra pandillas”.
#ElSalvador Esta noche el presidente @nayibbukele ha confirmado que solicitará prórroga del estado de excepción.
— Roberto Hugo Preza (@HugoPreza_) April 24, 2022
“En este momento, estoy convocando al Consejo de Ministros para que solicite a la Asamblea Legislativa, la ampliación por 30 días”@teleSURtv
Además, la Policía Nacional Civil de El Salvador precisó este sábado que desde la activación del régimen de excepción hasta el viernes 22 de abril no se ha registrado ningún homicidio. En esa misma jornada capturaron 408 terroristas para un total de 15.463.
Esta nación centroamericana sufre el asedio de la Mara Salvatrucha (MS-13) y Barrio 18, entre otras pandillas, cuyos miembros suman 70.000, de ellos 31.000 están en prisión.
Bukele aseguró que el 91 por ciento de los salvadoreños apoya la guerra contra las pandillas que impulsa su Gobierno, según datos de una encuesta de la empresa Consultoría Interdisciplinaria en Desarrollo (CID Gallup).
Más de 15,000 terroristas capturados en solo 27 días.
— Nayib Bukele (@nayibbukele) April 22, 2022
Seguimos…#GuerraContraPandillas https://t.co/04YgiPrlAo
Los días 25 y 27 de marzo, los enfrentamientos de pandillas dejaron 87 muertos, según declararon las autoridades. Ante el aumento de su actuación criminal, el jefe de Estado salvadoreño les declaró la guerra y solicitó al Congreso, controlado por el oficialismo, decretar un régimen de excepción.
La Asamblea Legislativa aprobó el decreto el 27 de marzo y con esta normativa, se permiten las detenciones sin orden judicial y se hizo una reforma para castigar con hasta 45 años de prisión a los integrantes de las pandillas.