El asesor de seguridad nacional, John Bolton, dijo que Estados Unidos estaba desplegando el portaaviones USS Abraham Lincoln y bombarderos en Oriente Medio para enviar un mensaje a Irán.
El secretario de Defensa en funciones de Estados Unidos, Patrick Shanahan, dijo, este lunes, que aprobó el envío de un portaaviones y bombarderos a Oriente Medio debido a los indicios de una “amenaza creíble por parte de las fuerzas del régimen iraní”.
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“Representa un reposicionamiento prudente de activos en respuesta a indicios de una amenaza creíble por parte de las fuerzas del régimen iraní”, dijo Shanahan en Twitter.
El asesor de seguridad nacional, John Bolton, dijo el pasado domingo que Estados Unidos estaba desplegando el portaaviones USS Abraham Lincoln y bombarderos en Oriente Medio para enviar un mensaje a Irán.
“Pedimos al régimen iraní que cese toda provocación. Responsabilizaremos al régimen iraní por cualquier ataque a las fuerzas estadounidenses o nuestros intereses”, agregó el funcionario, quien no proporcionó detalles sobre la amenaza.
1 of 2: Last night's announced deployment of the @CVN_72 and a @USAirForce bomber task force to the @CENTCOM area of responsibility, which I approved yesterday, represents a prudent repositioning of assets in response to indications of a credible threat by Iranian regime forces.
— Acting SecDef Pat Shanahan (@ActingSecDef) 6 de mayo de 2019
Tres funcionarios estadounidenses, que hablaron bajo condición de anonimato, para Reuters, sostuvieron que “las amenazas múltiples y creíbles” recogidas por la inteligencia eran principalmente contra las fuerzas estadounidenses en Irak. Agregaron que también había preocupación por los efectivos desplegados en Siria.
Uno de los funcionarios dijo que la inteligencia fue lo suficientemente específica como para detallar las ubicaciones de los posibles ataques contra las fuerzas de Estados Unidos y el marco de tiempo dentro del cual podrían ocurrir. Agregó que la amenaza no es solo contra las fuerzas de Washington en Irak, sino también contra las que entran y salen de la región.
La acción es un nuevo movimiento del Gobierno de Donald Trump para aumentar la presión sobre Irán. Los esfuerzos del Gobierno para aislar política y económicamente a Teherán comenzaron el año pasado, cuando Washington se retiró unilateralmente del acuerdo nuclear que había negociado en 2015 con la república islámica y otras potencias mundiales.