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Instaron a los ecuatorianos a mantener un clima de respeto a la ley sin enfrentamientos ni violencia.
Las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional de Ecuador respaldaron la decisión del presidente ecuatoriano, Guillermo Lasso, quien este miércoles disolvió la Asamblea Nacional (AN) y convocó a elecciones anticipadas.
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En una trasmisión televisada, el jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, general de división Nelson Proaño Rodríguez, declaró que las FF.AA. y la Policía Nacional mantendrán inalterable su posición de respeto a la Constitución y las leyes, así como su decisión de proteger los derechos, libertades y garantías de los ciudadanos en el marco del estado de Derecho.
Además, instaron a todos los ecuatorianos a mantener un clima de respeto a la ley sin enfrentamientos ni violencia.
Los mandos militares señalaron que la posición de la AN de enjuiciar políticamente al presidente Lasso y la decisión del mandatario de disolverla están sujetas a la Carta Magna y por esa razón deberán ser respetadas completamente por los ciudadanos.
Recordaron que son “instituciones obedientes y no deliberantes, y cumplimos nuestra misión con estricta sujeción al poder civil y la Constitución”.
Asimismo, expresaron su certeza de que el país no aceptará ningún intento de alterar el orden constitucional a través de la violencia para atentar contra la democracia.
Alertaron que, en caso de producirse hechos violentos, actuarán “con firmeza para cumplir la misión constitucional de proteger la vida y los derechos y garantías de los ecuatorianos”. Además, instaron “a la unidad de los ecuatorianos para mantener el clima de respeto a la ley sin enfrentamientos ni violencia”.
Horas después de que el Parlamento ecuatoriano enjuició políticamente a Lasso por el presunto delito de peculado, este invocó el artículo 148 de la Constitución y firmó el decreto de “muerte cruzada”, a través del cual disolvió el Legislativo y convocó a elecciones presidenciales y parlamentarias anticipadas.
El mandatario subrayó que tomó tal decisión ante lo que consideró una grave crisis política y conmoción interna. Sin embargo, sectores de la oposición calificaron su decisión de antidemocrática y cuestionaron que aplicó la “muerte cruzada” para huir del juicio político.
