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El Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST) de Brasil denunció este viernes el ataque sufrido cuando realizaban una protesta pacífica contra la sentencia de prisión del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.
Durante la protesta pacífica en las carreteras BR-101 y BR-230, principales vías de conexión entre la ciudad Joao Pessoa y Campina Grande, una persona aún sin identificar disparó contra los trabajadores desarmados e hirió a la militante Lindinalva Preira de Lima, que fue socorrida y trasladada a un hospital.
‼Sem Terra sofre tentativa de homicídio em bloqueio de BR na Paraíba ��
— MST Oficial (@MST_Oficial) 6 de abril de 2018
Durante mobilização na BR 101, na Paraíba, um homem ainda não identificado furou um bloqueio e atirou com arma de fogo contra Lindinalva Pereira de Lima Filha. A trabalhadora está a caminho do hospital. pic.twitter.com/iUS81lAayB
>> PT convoca movilización en rechazo a orden de detención de Lula
El MST mantiene el bloqueo de más de 50 carreteras en 24 estados como forma de protesta y resistencia a la orden de prisión contra Lula, dada la tarde del jueves por el juez federal Sergio Moro.
Moro dio al exmandatario brasileño hasta las 17H00 (hora local) de este viernes para que se presente en la sede de la Policía Federal, en Curitiba, donde guardará prisión.
Em Minas Gerais, na região metropolitana de BH, a mobilização segue na BR 381. Confira. #LulaValeALuta #LulaLivre pic.twitter.com/kxP1vgVTUK
— MST Oficial (@MST_Oficial) 6 de abril de 2018
>> Defensa de Lula presenta ante la ONU medida cautelar
La sentencia se dio una horas después de que el Supremo Tribunal Federal (STF) negara el habeas corpus solicitado por la defensa de Lula.
#OcupaSaoBernardo | Líderes de movimientos sociales afirmaron que Lula amaneció con ánimo, rodeado de familiares y amigos. Alrededor del Sindicato el clima es este: pic.twitter.com/Cb999qcrY6
— Nacho Lemus (@LemusteleSUR) 6 de abril de 2018
No es la primera vez que una protesta pacífica se ve empañada por sucesos de este tipo, razón por la cual los manifestantes han denunciado que en Brasil se pudiese estar naturalizando el asesinato de líderes sociales, como en el caso de Marielle Franco, asesinada en el centro de Rio con cuatro balazos en la cabeza cuando salía de una reunión de mujeres negras.
