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El presidente brasileño Jair Bolsonaro, se enorgulleció de su gestión de la pandemia, pese a que Brasil es el país latinoamericano que más fallecidos ha tenido por Covid-19.

El presidente brasileño Jair Bolsonaro, se enorgulleció de su gestión de la pandemia, pese a que Brasil es el país latinoamericano que más fallecidos ha tenido por Covid-19. | Foto: EFE

Publicado 21 septiembre 2021



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El mandatario de Brasil fue el primer orador de la Asamblea, según la tradición inaugurada desde 1947.

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, dio inicio al debate de jefes de estado y Gobierno del 76 periodo de sesiones de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) con un discurso donde mencionó los puntos clave de su gestión frente a su país.

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“Vengo aquí para mostrar un Brasil diferente a lo que señalan los medios de comunicación. Brasil ha cambiado mucho desde que asumimos el mandato en enero de 2019”, dijo el mandatario, antes de enunciar que no hay casos de corrupción durante los dos años y ocho meses de su administración.

En cambio, la Comisión Parlamentaria de Investigación (CPI) del senado brasileño que investiga su gestión durante la pandemia comenzó indagaciones en agosto de 2021 sobre indicios de corrupción por sobrefacturación en el contrato entre el Ministerio de Salud y la empresa Need Medicines para la adquisición de la vacuna Covaxin.

 

Igualmente, el gobernante lanzó duras críticas contra los Gobiernos socialistas anteriores. “Brasil tiene un presidente que cree en Dios, respeta la constitución, y los valores y la familia. Estábamos al borde del socialismo y ahora nuestras empresas estatales ahora son lucrativas”, agregó.

Economía

“Nuestro Banco de Desarrollo se utilizó para financiar obras en países comunistas, sin garantías. Quienes cumplen estos compromisos son los propios brasileños”, expresó, mientras prometía que Brasil tenía una credibilidad ya recuperada.

“Brasil tiene el programa de sociedades de inversión con el sector privado más grande de su historia. Programa que ya es una realidad y se encuentra en plena ejecución”, continuó.

En temas de infraestructura, apuntó que se subastaron para el sector privado 34 aeropuertos y 29 terminales portuarias. “Introdujimos el sistema de autorización ferroviaria, que acerca nuestro modelo al americano. En solo unos días, recibimos 14 solicitudes de permisos para nuevos ferrocarriles con casi 15.000.000.000 en inversiones privadas”.

Anunció que en los próximos días se realizaría una subasta para implementar la tecnología 5G en Brasil. Además, arguyó que se han logrado avances en saneamiento básico como la distribución de agua y alcantarillado, cuya concesión al sector privado se realizó en abril, como la subasta más grande en la historia del sector.

En contraposición, el costo del nivel de vida en Brasil se ha elevado, poniendo el precio de los alimentos y combustibles en precios poco asequibles para millones de personas de bajos recursosrexursos

Cambio climático y medioambiente

Sobre el tema del cambio climático, enunció que desde su Gobierno se han redoblado los esfuerzos “para eliminar la deforestación ilegal”. Según el mandatario, la deforestación se redujo en la Amazonía en un 32 por ciento en agosto de este año, en comparación con 2020.

En su opinión, esta disminución fue consecuencia del aumento de los recursos para la inspección ambiental. “Brasil ya es un ejemplo en generación de energía con un 83% proveniente de fuentes renovables”, precisó.

“Ningún país del mundo tiene una legislación ambiental tan completa como la nuestra”, añadió Bolsonaro quien aseguró que su Gobierno se propone reducir las emisiones de carbono. “En la COP26 buscaremos el consenso respecto de las normas del mercado de carbono”, dijo.

Argumentó que su agricultura moderna y sostenible tiene bajas emisiones de carbono. “Nuestro Código Forestal debe ser un ejemplo para otros países”, agregó.

Más de 261 hectáreas del Pantanal Brasileño, el humedal más grande del mundo, se vieron dañadas por incendios. En junio de 2020, más de 2.308 focos de incendio provocaron una catástrofe en la Amazonía brasileña con récord de combustiones.

Además, el pasado mes de agosto, organizaciones indígenas denunciaron la tala ilegal en la ruta UC-105 desde Nueva Italia a Puerto Beru en Perú.

Covid-19

Bolsonaro, uno de los mandatarios conocidos por ser negacionista de la pandemia de la Covid-19, defendió su gestión en medio de la crisis sanitaria global. “Las medidas de aislamiento han provocado inflación. Acabamos 2020 con más puestos de trabajo que el 2019 y este año creamos 1.800.000 puestos de trabajo nuevo”.

“Siempre he dicho que tenemos que luchar contra el virus y contra el desempleo”, agregó, al tiempo que mencionó la ayuda de 800 dólares entregada a 68 millones de brasileños que se quedaron sin fuentes de ingreso debido a la pandemia.

En Brasil, las manifestaciones de diversos grupos sociales son constantes debido a la pésima gestión de la pandemia por parte del Jefe de Estado, quien además está siendo investigado por una comisión parlamentaria por su actuación en la lucha contra la Covid-19.

“Apoyamos los esfuerzos de vacunación”, resaltó el mandatario que ha declinado inocularse y ceñirse a las medidas sanitarias en los estados brasileños. Además, ha politizado la adquisición de vacunas rusas y chinas solo por motivos ideológicos.

En su discurso, criticó a los gobernadores y alcaldes por las políticas de aislamiento y calificó de innecesario los pasaportes de vacunación, una medida que dijo, no aplicará en su país, al tiempo que anunció que casi el 80 por ciento de su población adulta está vacunada.

En este sentido, ha propuesto tratamientos ineficaces para el coronavirus y no ha proyectado campañas de prevención y coordinación nacional al respecto. Por el contrario, refiere que él confía en el tratamiento temprano y la autonomía de los médicos para aplicarlo.

Política Internacional

Jair Bolsonaro reconoció que siempre ha participado de las misiones de Paz de la ONU y que siempre ha acogido a los refugiados. “El futuro de Afganistán también nos preocupa profundamente. Otorgaremos visas humanitarias a cristianos, mujeres, niños y jueces afganos”.

Puso en relieve que en 2022 Brasil volverá a ocupar un puesto en el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas.

Finalmente, Bolsonaro recordó que el pasado 7 de septiembre, Día de la Independencia en Brasil, millones de brasileños partidarios de su Gobierno salieron a las calles para apoyarlo.

Sin embargo, no mencionó que su labor política reciente ha puesto en crisis la relación con el poder judicial brasileño, tras sus amenazas a la democracia, ante las venideras elecciones y su posible derrota. Tampoco menciona que la voz "Fuera Bolsonaro" es constante en las manifestaciones desde hace más de un año.


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