El asesinato de líderes sociales y la violencia en Colombia se han incrementado gradualmente durante enero de 2018 con un total de 23 muertes en todo el país, según datos de distintas organizaciones e instituciones, cuyas cifras varían.
Según un informe del Instituto de Estudios para el Desarrollo de la Paz (Indepaz), al menos 23 líderes han sido asesinados durante el 2018, de los cuales cinco fueron perpetrados por el Ejército de Colombia, uno por grupos disidentes, mientras que el resto (17) aún se desconocen los autores.
Víctimas múltiples durante enero de 2018
La mayoría de los asesinatos ocurrieron de forma sistemática, en un mismo día y en diferentes o el mismo estado dentro de Colombia.
- 17 de enero: Dos muertes registradas en Antoquia y Santander. (No se han identificado a los culpables).
- 18 de enero: Dos asesinatos registrados en Antoquia y Córdoba. (No se han identificado a los culpables).
- 19 de enero: Dos asesinatos reportados en las regiones de Arauca. (Perpetrados por el Ejército colombiano).
- 20 y 21 de enero: Se reportaron dos víctimas en el estado de Arauca, en el primero aún se desconoce a los culpables, el segundo fue asesinado por un disidente.
- Entre el 22 y 23 de enero: Tres víctimas en los estados de Nariño, Arauca y Cauca.
- 25 de enero: Fueron asesinados cuatro líderes sociales en la región de Sucre, tres de ellos eran hermanos. Una de las muertes fue a causa del Ejército, de las otras tres aún no existen culpables.
- El resto de las muertes fueron ejecutadas entre el 26, 27, 29 y 30 de enero.
Antioquia, Cauca, Valle del Cauca, Nariño y Norte de Santander son los estados con mayor violencia contra los líderes sociales, además de las regiones Chocó y Cesar, explicó el vocero colombiano de la organización Somos Defensores, Carlos Guevara.
Asimismo, la Corporación Regional para la Defensa de los Derechos Humanos (Credhos) denunció que lo más notable de los casos es la impunidad, ya que la Fiscalía no realiza investigaciones exhaustivas para identificar a los asesinos, además de que no se indaga a los grupos armados que existen, como los paramilitares.
“Una de las debilidades que notamos desde la corporación es que, frente a la identificación del agresor también tiene que haber mucha eficiencia por parte del Ministerio Público para que no se archiven”, afirmó el presidente de Credhos, Iván Madero.
De acuerdo a los reportes de la Fiscalía, en 2017 se denunciaron 101 asesinatos contra defensores de derechos humanos, líderes sociales, políticos y comunales.
Las organizaciones sociales prevén que existen más víctimas y exigen al Gobierno colombiano implementar medidas de seguridad a favor de los líderes sociales, quienes solo pueden recurrir a la autoprotección e incluso evitar transitar por ciertos lugares.
>> Movimientos sociales colombianos exhortan al diálogo con el ELN