El Juzgado argentino en lo Criminal y Correccional número 13 sentenció nulidad en la demanda interpuesta contra las Abuelas de Plaza de Mayo por la Procuraduría General de Buenos Aires.
La denuncia fue impulsada por el jefe de Gobierno de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, quien pretendía inculpar a las activistas por obstrucción de la vía pública en el marco de la conmemoración de los 40 años de su labor.
El Juzgado Nacional, a través de la fiscal Mónica Cuñarro, desestimó esta acusación pues considera que la celebración no representa ningún delito.
Asimismo, Luis Zelaya, juez argentino, defendió a las Abuelas de Plaza de Mayo y recalcó que "no existió un daño material y sí rutas alternativas para el tránsito, sumado a que su intención era solamente celebrar".
Por motivo de esta celebración, las Abuelas se concentraron en la avenida Corrientes de la ciudad capital argentina el pasado 4 de diciembre de 2017, acto que fue estimado por el funcionario porteño como obstrucción en el funcionamiento de los servicios públicos, dictamen establecido en el artículo 194 del Código Penal de Argentina.
“Las manifestaciones denunciadas se encuentran avaladas por derechos constitucionales, que al celebrarse pacíficamente, nada puede reprocharles la justicia penal a los participantes”, determinó Zelaya.