En los centros de recepción instalados por el Gobierno griego existe hacinamiento y los refugiados no se alimentan bien.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) insistió este jueves en la urgencia de tomar medidas para mejorar las condiciones en las que viven solicitantes de asilo en los centros de recepción de las islas griegas del Egeo.
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El representante de ACNUR en Grecia, Philippe Leclerc, señaló que es crucial que la respuesta gubernamental sea "integral" y vaya más allá de las "soluciones a corto plazo" ante la situación de precariedad que padecen los refugiados.
"Esto significa garantizar unas condiciones de acogida adecuadas, acceso a procedimientos de asilo justos y rápidos, oportunidades de integración para quienes se conceda asilo y retornos ágiles para quienes no necesitan protección internacional", agregó Leclerc.
The events in #Moria are a wake-up call of the long-standing need to address the precarious situation for thousands of asylum seekers on the Greek islands and to accelerate their safe and orderly transfer to more appropriate accommodation on mainland. https://t.co/8tHzobGslg
— UNHCR Greece (@UNHCRGreece) September 24, 2020
Una serie de incendios devastaron en días pasados el campo de refugiados de Moria, ubicado en Lesbos, lo que provocaron que unas 12.000 personas se quedaran sin techo. Ante la gravedad de la situación, el Gobierno de Grecia tomó varias medidas, que parecen ser insuficientes.
El Ejército heleno y organizaciones humanitarias lograron establecer un centro de emergencia para albergar a los afectados, unos 9.400 solicitantes sin hogar se encuentran allí. No obstante, medios internacionales han descrito que existe hacinamiento y los refugiados no se alimentan bien.
En tal sentido precisan que reciben una comida al día, mientras las carpas se encuentran pegadas unas a otras, algunas sin camastros para que las personas duerman; además de no contar con la higiene imprescindible para prevenir el riesgo de contagios por la Covid-19.
"Los sucesos en Moria son una llamada de atención sobre la necesidad de abordar la precaria situación de miles de personas en las islas y de acelerar su traslado seguro y ordenado a un alojamiento más apropiado en la península", valoró Leclerc.