La estadounidense Serena Williams declinó participar en el Abierto de Australia por considerar que no está en las condiciones adecuadas para asistir a la cita deportiva tras haber dado a luz el pasado mes de septiembre.
"Mi entrenador y mi equipo siempre decían: 'solo ve a torneos cuando estés preparado para llegar hasta el final'. Puedo competir, pero no quiero simplemente competir, quiero hacerlo mucho mejor que eso y, para hacerlo, necesitaré un poco más de tiempo. Aunque estoy decepcionado al respecto, he decidido no competir en el Abierto de Australia este año", expresó la veterana tenista en un comunicado.
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La deportista de 36 años, y ganadora 23 veces del Grand Slam, se alzó con la victoria del Abierto de Australia en 2017 tras haber derrotado en dos sets a su hermana Venus, lo cual la convirtió en la máxima ganadora de torneos mayores.
Desde su trabajo de parto, Williams sólo ha jugado un partido de tenis, el cual perdió en Abu Dhabi el 30 de diciembre de 2017 en una exhibición que la enfrentó contra la letona Jeļena Ostapenko.
Otros de nombres que se suman a las notables ausencias para el Abierto de 2018 son el del escocés Andy Murray, y el del japonés Kei Nishikori, ambos por lesiones que les imposibilitan participar del torneo.
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