El secretario de Defensa de Estados Unidos, James Mattis, arribó este lunes a la capital de Iraq, Bagdad, en su primera visita oficial a este país desde que asumió el cargo. Su llegada ocurre de manera sorpresiva ya que, contrario a lo que se acostumbra, no fue notificada con antelación.
Antes de llegar a la capital iraquí el secretario de Defensa norteamericano sostuvo que no están en el país árabe para "apropiarse del petróleo de nadie", indicó citado por la agencia de noticias Reuters.
"Todos en Estados Unidos en general hemos pagado por el gas y petróleo", afirmó Mattis en presencia de los periodistas que viajaron con él a Iraq. El país seguirá "haciendo lo mismo en el futuro", agregó.
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La visita sorpresa de Mattis coincide con el comienzo este domingo de la ofensiva para expulsar definitivamente al grupo terrorista autodenominado Estado Islámico (Daesh por su sigla en árabe) de la mitad occidental de la ciudad de Mosul, en el norte de Iraq.
Estados Unidos apoya a las tropas gubernamentales en su lucha contra los yihadistas y participa en la batalla de Mosul con asesores militares y hombres que ayudan a los soldados iraquíes sobre el terreno.