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Más de diez mil personas protestaron este martes en las calles de la capital de Honduras en rechazo a la reelección del presidente Juan Orlando Hernández en los comicios del próximo 26 de noviembre, por considerar que viola la Constitución.
La movilización partió desde El Obelisco hasta el frente de la sede del Tribunal Supremo Electoral (TSE), en el sur de Tegucigalpa. Los participantes eran en su mayoría estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), así como partidarios de diferentes partidos políticos y el pueblo garífuna.
"Fuera JOH (iniciales del presidente)", se escuchó en la movilización que fue convocada por la Convergencia Ciudadana contra el Continuismo, conformada por la sociedad civil, y la Alianza de Oposición contra la Dictadura, lidera por el exmandatario Manuel Zelaya, derrocado mediante un golpe de Estado en 2009.
Los manifestantes exigieron al TSE "la nulidad de la inscripción de Juan Orlando" como candidato a las elecciones por ser constitucionalmente ilegal, dijo Gabriel Bonilla, activista estudiantil, en declaraciones a la agencia AFP.
El candidato presidencial Salvador Nasralla, al dirigirse a los presentes en la marcha, indicó que en los comicios del 26 de noviembre solo aceptarán los resultados de las actas físicas.
"Solo confiamos en el conteo a boca de urna", dijo Nasralla y enfatizó que no aceptarán resultados del sistema de transmisión, no importa si nos toca esperar".
Nasralla criticó al Tribunal Supremo Electoral (TSE) por "depender de las órdenes del Ejecutivo".
A la movilización acudió Manuel Zelaya, quien afirmó que las reformas propuestas por la Alianza de Oposición contra la Dictadura son "para lograr la equidad de justicia que no tiene el pueblo".
Zelaya también fustigó al TSE y dijo que "el pueblo hondureño no debe escuchar lo que diga el Tribunal porque eso lo tienen arreglado en una acta, eso no lo aceptamos, deben esperar la información de los resultados que dará la Alianza de Oposición".
En la marcha estuvo presente la hija de la ambientalista y líder indígena asesinada Berta Cáceres, quien exhortó a los partidos políticos a detener el modelo actual que rige en Honduras.
La Constitución de Honduras veta la reelección presidencial, sin embargo la Sala Constitucional aceptó un recurso presentado por un grupo de diputados oficialistas para declarar improcedente la prohibición.
La oposición hondureña reclama que la Sala Constitucional carece de atribuciones para modificar la Constitución y la acusan de estar subordinada al Ejecutivo. Asimismo, acusan al TSE, integrado por tres magistrados, de seguir las órdenes del presidente Orlando Hernández para preparar un fraude en su favor en las elecciones del 26 de noviembre.
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